La comisión especial del Senado que evalúa a los aspirantes para integrar la Junta Central Electoral ha encontrado que muchos de esos candidatos reúnen las condiciones para ser escogidos por el hemiciclo.
En las entrevistas se ha comprobado qué profesionales cuentan con el aval requerido y necesario para prestigiar a la Junta. ¿Sin embargo? Se teme que los seleccionados provengan de una lista “santiguada” por los intereses de los partidos, como ha ocurrido siempre.
Es decir, que el liderazgo partidario habrá de ceder en posiciones que faciliten la conformación de la JCE.
Lo mismo ocurrirá también con el Tribunal Superior Electoral y la Cámara de Cuentas, ya que la experiencia pasada y reciente marca la forma como estos organismos han sido integrados, de acuerdo al cristal de los intereses.