Santo Domingo.-En el argot popular son identificadas como “gallinitas”, quizás por el plumaje en su cabeza.
A diferencia de otras aves, rara vez permanecen perchadas o posadas en ramas de árboles ya que se compasean regularmente por las costas, su hábitat natural.
Igual, por sus alargadas patas han servido para calificar despectivamente con su nombre a las mujeres de piernas flacas, a quienes en ocasiones la gente les dicen: “canilla de búcaro”.
Con este último nombre de “búcaro” se conoce por doquier, aunque científicamente son identificadas por Burhinus bistriatus.
De acuerdo con Nelson García Marcano, encargado de la División de Inspección del Viceministerio de Áreas Protegidas y Biodiversidad, esta ave de hábito furtivo o muy discreto y nocturna hace vida en las gramíneas, sabanas y matorrrales.
Es nativa del país, otras regiones del Caribe y Estados Unidos. En territorio criollo está distribuída en la costa norte, la isla beata y en humedades como el Bajo Yuna, entre otros.
“Se alimenta de insectos, moluscos y a veces de lagartos y pequeños roedores”, explicó el experto. Añadió que normalmente andan en parejas y grupos familiares.
Por estar amenazada en la categoría En Peligro (EP) de la Lista Roja Nacional, 2011, es poco común. Campesinos la usan de mascotas para que les eliminen las cucarachas y otras plagas, como también de “perro guardián ya que sus gritos se escuchan a la larga distancia.