ATLANTA.- Con la Serie Mundial rumbo a Atlanta, algunos televidentes podrían sentirse ofendidos de ver que los aficionados de los Atlanta Braves continúan haciendo el movimiento con la mano y cantando con fuerza.
Después de que equipos de la NFL y el béisbol de las Grandes Ligas han eliminado sus nombres, considerados racistas y ofensivos por los indígenas estadounidenses, los Bravos persisten con el grito de guerra y movimiento de hacha – con el beneplácito del comisionado de las Grandes Ligas Rob Manfred.
Lo que más le importa a Manfred es que los Bravos cuenta con el apoyo de la tribu Eastern Band, de los indígenas Cherokee, y que se encuentra en Carolina del Norte a tres horas de Atlanta. “La comunidad autóctona en la región apoya completamente lo que hacen los Bravos, incluyendo el movimiento de manos (conocido como el tomahawk chop’)”, dijo Manfred el martes.