Las banderas de la sede europea de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Ginebra fueron, este lunes, arriadas a media asta en recuerdo de los 101 trabajadores del organismo muertos desde el estallido de hostilidades entre Israel y Hamás, que suponen la mayor pérdida de vidas humanas de Naciones Unidas en un sólo conflicto desde su fundación en 1945.
A primeras horas de la mañana las banderas en las entradas del complejo de la organización en la ciudad suiza estaban ya a media asta, y además se retiraron todas las enseñas nacionales de sus más de 190 Estados miembros que hay en uno de los accesos, junto a la Plaza de las Naciones.
Los 101 fallecidos eran trabajadores de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA), principal agencia de la ONU con actividad en Gaza, y que actualmente ofrece refugio en sus instalaciones en la Franja, principalmente escuelas, a más de 760.000 desplazados internos, aproximadamente un tercio de los gazatíes.
La tercera parte de estos trabajadores han muerto mientras se encontraban en las zonas del centro y el sur de la Franja de Gaza, donde las autoridades israelíes han pedido a los gazatíes que se desplacen ante la campaña terrestre que están efectuando en el norte del enclave palestino.
El gesto de este lunes también busca homenajear a otros trabajadores humanitarios fallecidos en el conflicto, como los al menos 16 efectivos sanitarios que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) han fallecido en diversos ataques.
Se ha invitado también a otras agencias de la ONU con sede en Ginebra, como la propia OMS, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) o la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que también se unan a este homenaje este lunes arriando sus respectivas banderas.