Todas las encuestas dan unos niveles de intención de participación en las elecciones municipales del 16 de febrero que ronda el 30 por ciento, el cual podría subir a un 40 por ciento debido al esfuerzo que hacen los partidos y los candidatos el día de las elecciones para movilizar a sus simpatizantes.
Se está convirtiendo en costumbre que la nueva militancia de los partidos mayoritarios se muevan por dinero, que es lo que los peledeístas le llaman “logística” y los antiguos perredeístas denominaban “grasa”.
Es un fenómeno distinto al de compra de votos, porque en este caso de lo que se trata es de darle “incentivo” a los propios para que se motiven a acudir a las urnas. La mayor abstención podría darse en los grandes centros urbanos, como el Distrito Nacional y el municipio Santo Domingo Este.
La maquinaria
Eso hace indispensable que la maquinaria partidaria funcione. Hasta el momento el PLD ha contado con la mejor maquinaria electoral, pues tenía identificado a cada uno de sus simpatizantes y militantes por mesas electorales y llevaban el registro de quienes fataban por votar para entonces salir a buscarlo en horas de la tarde.
Está por verse qué tanto se afectó esa maquinaria ya que la misma fue ideada por Franklín Almeyda, quien levantó tienda aparte para irse con la Fuerza del Pueblo. Además hay confusión de quien está y quien solo aparenta estar.
