Houston.- El puertorriqueño Javier Báez conectó batazo de cuatro esquinas que ayudó a los Cachorros de Chicago a ganar la Serie de División de la Liga Nacional y convertirse en el pelotero latinoamericano más destacado de la jornada de la fase final en las mayores.

Mientras que el primera base mexicano Adrián González también jugó en plan protagonista al remolcar una carrera en el triunfo de los Dodgers de Los Ángeles, que evitaron la eliminación.

Báez conectó uno de tres jonrones de los Cachorros, que vencieron 6-4 a los Cardenales de San Luis en el cuarto partido de la serie que disputaron al mejor de cinco.

La victoria de los Cachorros les dio la ventaja de 3-1 con la que se ganaron el derecho a estar en la lucha por el banderín del Viejo Circuito contra el equipo que triunfo en la serie que disputan los Dodgers ante los Mets de Nueva York, a partir del sábado.

Báez hizo sonar el bate al igual que el guardabosques Kyle Schwarber y el primera base Anthony Rizzo, contra la serpentina de los Cardenales.

Aprovechando su condición de local al jugar en su campo del “Wrigley Field”, Báez encendió el ambiente entre los asistentes al partido con su toletazo de vuelta entera.

Para el boricua fue su primer vuelacercas en lo que va de la postemporada, pero se convirtió en el verdugo de los Cardenales al remolcar tres de las seis carreras de los Cachorros.

Báez hizo tres presentaciones ante el lanzador y en dos ocasiones tuvo contacto con la bola, remolcó tres carreras, sus primeras tres en la fase final, y llegó una vez a la registradora. Al concluir el partido el boricua dejó en .800 su promedio con el tolete en fase final.

En el ataque latinoamericano, el dominicano Starling Castro pisó la registradora para anotar una carrera, aunque en tres viajes que hizo al plato no conectó ni una vez.

En el montículo el relevo dominicano Fernando Rodney, que salió cuarto, trabajó dos tercios del séptimo episodio, dio una base y ponchó a un enemigo.

Su compatriota Pedro Strop trabajó una entrada y ponchó a dos enemigos y el cerrador venezolano Héctor Rondón (2) sumó su segundo salvamento en la fase final.

Rondón, que deja en 6.00 su promedio de efectividad, sacó los últimos tres outs del partido, aceptó un imparable y ponchó a dos enemigos para preservar con sus disparos el triunfo de los Cachorros. Por los Cardenales el parador en corto dominicano Johnny Peralta tuvo tres oportunidades con el bate, pegó una vez y anotó una carrera.

En Nueva York, donde se jugó el otro partido de la serie de División de la Liga Nacional, el primera base mexicano Adrián González impulsó una carrera, que ayudó a los Dodgers a vencer de visitantes 3-1 a los Mets.

Con la victoria los Dodgers pusieron números de 2-2 en la serie de División de la Liga Nacional que se juega al mejor de cinco, obligando a un quinto y definitivo partido para definir al ganador que pasará a la serie por el título de Liga.

Los Dodgers tuvieron nuevamente a su segunda base Chase Utley en el banquillo, luego de que se deslizó de manera brutal, incluso fuera de la línea de la almohadilla, y golpeó al campocorto panameño Rubén Tejada, de los Mets, fracturándole el peroné derecho.

González se encargó de impulsar una anotación para darle forma a la pizarra a favor de su equipo. El mexicano pegó sólo una vez en cuatro viajes a la caja de bateo, remolcó una carrera, su quinta en lo que va de fase final, anotó una, y dejó en .313 su promedio de bateo.

El guardabosques puertorriqueño Enrique Hernández apoyó el ataque de los Dodgers al hacer contacto dos veces en los cuatro duelos que tuvo ante el lanzador y llegó una vez a la registradora.

Por los Mets, el guardabosques cubano Yoenis Céspedes hizo contacto sólo una vez en cuatro ocasiones que salió a la caja de bateo.

Mientras que el jardinero dominicano Juan Lagares también encontró la pelota una vez en dos ocasiones que estuvo enfrente del lanzador el estelar Clayton Kershaw, que fue el verdadero héroe salvador de los Dodgers.

El quinto juego de la serie se jugará el jueves a las 8-07 hora del Este en el Dodger Stadium, campo de los Dodgers, que tendrán de abridor a Zack Greinke, contra el lanzador de los Mets, Jacob DeGrom. El ganador de ese partido ya conoce que su próximo rival serán los Cachorros, que vivieron una jornada triunfal al volver a dar la imagen de equipo ganador y, de momento, sin los efectos de la “maldición de la cabra».