El artista boricua Bad Bunny, aclamado ahora como la estrella musical más influyente del mundo, entregó anoche el primero de los dos conciertos que tiene pautado para dar en República Dominicana.
Llenó a toda capacidad, reventó la noche de emociones y color logrando que el público se quedara de pie durante más de dos horas de concierto.
Cantó todos sus éxitos en esta gira “World’s Hottest Tour” que inicia ahora por Latinoamérica y que lo trajo al escenario 21 días después de estar descansando. Dijo la palabra Santo Domingo 14 veces y no se cansó de dar gracias por el apoyo que siempre ha recibido de los dominicanos.
Se emocionó hasta las lágrimas cuando hablaba de sus comienzos aquí en el 2016 y el público le gritaba “Benito te amamos”.
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No faltaron sus temas de ayer y de hoy, hizo un repaso por su carrera desde que entró al escenario tropical con palmeras, playas, arena y unos bailarines vestidos de diversos colores. Abrió con el tema “Mascow Mule”, y desde ese instante el público se subió a sus sillas y nunca más volvió a bajar.
Llevó a los invitados Raw Alejandro a quienes los fanáticos gritaron a todo pulmón y aclamaron como el gran artista que es.
El urbano, novio de la cantante Rosalía y nominado siete veces a los premios Latín Grammy aprovechó para cantar solo en el escenario dos temas y revelar ahí que el próximo año se presentará en el país.
Ángel Dior fue otro de los artistas que Bab Bunny subió al escenario, un talento emergente de la calle 42 de Capotillo que está alzando vuelo dentro del dembow. “ Esta noche es de ustedes, aquí vamos a cantar hasta que ustedes quieran, nos vamos cuando ustedes decidan”, decía Bad Bunny y arrancó los gritos a pulmón de los que abarrotaron el Estadio.
“Me porto bonito”, “La corriente”, “Estamos bien”, “Te bote”, “Playa”, “pa ti”, su primer dembow con El Alfa y otros fueron de los temas que cantó en este concierto.
Literalmente el artista de 28 años convirtió el Estadio en una discoteca gigante por las luces, lacer, fuegos artificiales y la música que retumbó en todo el lugar.
Lo más impresionantes fue cuando el artista se subió en una especie de alfombra mágica y recostado de una palmera le dio la vuelta a todo el escenario pasando cerca de todos los que entraron al lugar.
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