Santo Domingo.-La suspendida magistrada Awilda Reyes y el exconsejero del Poder Judicial Francisco Arias Valera pasaron su primer día en la cárcel de Najayo, tras ser trasladados al Centro después que el presidente de la Segunda Sala de la Corte de Apelación del Distrito Nacional que fungió como juez de Instrucción Especial, Ramón Horacio González, les dictó tres meses de prisión.

A la jueza Reyes y Arias Valera los llevaron a las 4:15 de la madrugada, donde permanecerán en zonas de máxima seguridad en ambos centros de Corrección y Rehabilitación de Najayo, para que su dignidad e integridad física no corra peligro por su condición de jueces y los vínculos de las acusaciones.

La decisión del juez establece que los resultados de las pruebas caligráficas realizadas a las firmas y nombres estampados en un recibo que alegadamente emitió el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Mariano Germán, dieron positivo; es decir, que sí es la tipografía caligráfica de los magistrados.

También establece que en el testimonio el director de la Escuela de la Carrera Administrativa, Justiniano Montero, y el secretario del Consejo del Poder Judicial, Edgar Elieser Torres Pichardo, declararon que la jueza admitió ante el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Mariano Germán, que había recibido la suma de RD$350 mil.