Karina García llevaba semanas advirtiendo que su vida corría peligro.
Ella buscaba convertirse en la primera mujer en llegar a ser alcaldesa del municipio de Suárez (departamento de Cauca, oeste de Colombia), pero falleció acribillada este domingo junto a su madre y cuatro líderes sociales y políticos de su región.
«Le pido a los seguidores y a los demás candidatos que no continúen haciendo comentarios irresponsables acerca de mi candidatura ¡Por dios, no sean irresponsables!, esto puede tener consecuencias para mí, incluso fatales», advirtió García a través de un video hace apenas 15 días.
La mujer, que tenía solo 31 años, empezó a preocuparse cuando los afiches de su campaña comenzaron a ser pintados de negro desde hace unos meses.
Además, denunció que empezaron a aparecer noticias falsas sobre ella diciendo que en caso de llegar a la Alcaldía de Suárez iba a llevar paramilitares y quitarle tierra a la gente.
La masacre
Después de varias horas sin que se sepa de su paradero, el domingo se pensaba que había sido secuestrada.
Por la noche de ese dos explosiones alertaron a los vecinos de un sector en las afueras de Suárez y así fue que encontraron incinerado y con varios orificios de bala al vehículo en el que se transportaba García.
Este lunes, las autoridades confirmaron el hallazgo del cadáver de la candidata por el Partido Liberal y y otros cinco cuerpos más.
Además de García y su madre, la Policía de Colombia identificó a Aidé Trochez, representante de las víctimas del conflicto armado de la región; Héctor González, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Las Brisas en Suárez; Lavedis Ramos, parte del equipo de campaña, y Yeison Obando, aspirante al concejo municipal.
Los fiscales de la ciudad indicaron que el vehículo donde iban todos fue emboscado en la mitad de una carretera por otro auto que se cruzó en la mitad del camino.
De aquel motorizado salieron hombres con armas largas y comenzaron a disparar una y otra vez contra García y sus acompañantes.
Después de perpetrada la masacre, incineraron el vehículo.
Karina García contaba con un esquema de seguridad asignado por la Unidad Nacional de Protección (entidad estatal) ante las amenazas recibidas.
Más asesinatos selectivos
Los asesinatos selectivos se han convertido en uno de los mayores problemas que atraviesa Colombia después del fin del conflicto armado con la exguerrilla de las FARC hace cerca de tres años.
La Misión de Observación Electoral de Colombia señaló este lunes que desde que se presentaron las candidaturas para las elecciones departamentales y municipales, hace tan solo 35 días, ya fueron asesinados cinco postulantes.
El país realizará sus comicios regionales a finales de octubre.
Mientras tanto, diferentes instituciones sostienen que entre 200 y 400 líderes sociales han sido asesinados en los últimos tres años.
La Defensoría del Pueblo señaló que en la región donde vivía García se han contabilizado durante el año 40 panfletos con amenazas de muerte a dirigentes y políticos firmados por grupos armados como las Águilas Negras, Autodefensas Gaitanistas Unidas de Colombia y disidencias de las FARC.
«Se refleja la intención de acallar las exigencias colectivas que representan líderes y lideresas de organizaciones campesinas, indígenas y afrodescendientes, así como líderes que apoyaron el acuerdo de paz, que hoy exigen la implementación del mismo», indica el balance hecho por la entidad.
Con lo sucedido el domingo, suman 13 los asesinatos selectivos en apenas 13 días en la región donde Karina García soñaba con llegar a ser alcaldesa.
Recompensa y acusaciones
El gobierno de Colombia, a través del ministro de Defensa, Guillermo Botero, anunció una recompensa de alrededor de US$45.000 para quien pueda dar información que conduzca a la captura de dos presuntos autores de los asesinatos
Los dos sospechosos por los que se ofrece el monto son alias Mayimbú y alias Marlon, señalados de ser parte de un grupo disidente de la exguerrilla de las FARC.
Era conocido que este grupo armado tenía presencia en los alrededores de la ciudad de Suárez.
Botero informó que se dispuso la llegada de grupos especializados en inteligencia e investigadores al departamento de Cauca.
«Fue una masacre ejecutada de la peor manera«, concluyó el ministro.
*Fuente BBC