Aquí igual que allá

Aquí igual que allá

Aquí igual que allá

De un periódico gratuito español –“Viva”- reproduzco una carta de una lectora que describe una situación igualita a lo que ocurre aquí, en torno al rol de la mujer en la sociedad. Ella dice así:

 

“Si a muchas amas de casa las pusieran al frente de la administración del Estado, como Presidenta o Ministra de Economía, seguro que esta crisis se resolvía. Lo primero que haríamos sería empezar a trabajar de sol a sol, como lo hacemos en nuestras casas.

No perderíamos el tiempo en insultar al adversario, sino que nos dedicaríamos a trabajar, que para eso les paga el pueblo.

 Quitaríamos tanto derroche de lujosos automóviles y lujosos despachos, prescindiríamos de esos armarios repletos de ropa y complementos que vemos lucir a los que han rebajado el sueldo a los empleados y a los jubilados, pero ellos siguen con sus espléndidos sueldazos, viajando en aviones con sus asesores de imagen y protocolo.

Quitaríamos tanto personal que no hace nada sino cobrar buenos sueldos para revolotear detrás de unos y otros como palmeros (limpiasacos). Y, por supuesto, no podríamos perder tiempo en reuniones de suculentos almuerzos de trabajo.

“Conozco a más de una ama de casa –prosigue la lectora de ‘Viva’- que pone en la mesa un pollo asado, reparte y reparte a todos y cuando le preguntan: ¿y tú?, responde: es que me sienta mal, me va mejor con esta papa hervida.

 O cuando llega la hora de cambiar de vestuario sacan del baúl de los recuerdos ropa de otros años y son capaces de combinar y aún así van más elegantes, porque la elegancia se lleva por dentro y no como los que están al frente del Gobierno que gastan fortunas en trajes y complementos, que no repiten ni un solo día. ¡Claro!, a costa de los ciudadanos, que se lo pagamos. Así cualquiera, que no tenga escrúpulos.

“Las amas de casa –concluye- no son mujeres florero, sino entregadas al trabajo y al servicio de los suyos, que amplían su jornada laboral a 24 horas, siete días a la semana.

 Es el ama de casa la que posee una capacidad única de resistir en situaciones extremas.

¿Cuántas profesiones desarrolla la mujer en casa, desde que se levanta? ¿Si nos tuvieran que pagar por cada una de ellas? ¿Se dan cuenta de lo que se ahorra el Estado con las amas de casa? Sin embargo, somos las más desfavorecidas”.



El Día

Periódico independiente.

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