- Publicidad -

Apuremos en dispositivos médicos

República Dominicana se ufana de todo: de que el merengue y la bachata están acabando en tierras extranjeras, que tenemos las mejores playas, los mejores peloteros y hasta las mujeres más bellas, si subimos la bandera de Amelia Vega. Pero, tocando el tema, ¿podemos sacar el pecho en dispositivos médicos? Parece que no, al menos en el continente.

Costa Rica encabeza el mercado continental de producción de dispositivos médicos de exportación, basado en los altos niveles de educación básica, tecnológica y especializada de su población. Después está México. Estados Unidos lo es a nivel global.

En América Latina y el Caribe este mercado está en plena expansión, marcado por la digitalización de la salud, el envejecimiento poblacional y la creciente demanda de atención médica avanzada.

El tamaño del mercado en el continente lo pone el dólar: 38 mil millones en el 2024, cifra proyectada para llegar al 5.5 por ciento hasta el 2034 y situarse en 65.18 mil millones, de acuerdo a proyecciones de la plataforma Informes de Expertos.

Los dispositivos médicos son instrumentos, máquinas, implantes o artículos relacionados utilizados para diagnosticar, prevenir, monitorear o tratar enfermedades y afecciones médicas, que incluyen herramientas elementales, como termómetros, hasta tecnologías avanzadas como marcapasos y sistemas de imágenes.

Las tendencias en este mercado están bien definidas: integración de la inteligencia de mercado en tiempo real y la creciente adopción de la inteligencia artificial para mejorar y acelerar la innovación en la atención médica en el mercado.

La pauta la marcan los dispositivos IoT (internet de las cosas), con monitoreo remoto, gestión de medicamentos y tele consulta; también, tecnologías de fácil acceso, como Bluetootfh y Wi-Fi, así como conectividad celular integradas a dispositivos para monitoreo de signos vitales, bombas de infusión y aparatos auditivos y cardíacas implantables.

El panorama de este mercado es muy alentador y el plato está servido para la expansión de la atención médica privada, inversión extranjera en infraestructura hospitalaria y mayor conciencia sobre enfermedades crónicas.

República Dominicana va tras los pasos de sus competidores de Centroamérica y de todo el continente, con crecimiento sostenido en los últimos años en la fabricación, empleo e inversión extranjera.

Cifras del Ministerio de Industria y Comercio y Pymes resaltan que, a agosto de este año, las exportaciones de dispositivos médicos y farmacéuticos alcanzaron los mil 929 millones de dólares

La República Dominicana cuenta con 40 empresas dedicadas a la fabricación, con generación de 32 mil empleados, de acuerdo a la Asociación Dominicana de Zonas Francas (ADOZONA), que resalta la inversión extranjera como punto clave, sobre todo provenientes de Estados Unidos y Europa.

Dominicana se ha centrado en las llamadas HealTech (mercado global de este segmento está valorado en 387.8 mil millones de dólares, de acuerdo a Global Market Insights), con dispositivos avanzados aplicaciones móviles de salud, IA y robótica médica.

Tenemos en RD el privilegio de estar cerca del mayor comprador de esos dispositivos, Estados Unidos, y tener un Tratado de Libre Comercio con ellos; también, mano de obra calificada (no tanto como la de Costa Rica y yo diría que, además, barata) e infraestructura organizada en las zonas francas.

El nicho de dispositivos médicos y farmacéuticos en la República Dominicana emplea de manera directa a más de 33,000 personas y tiene presencia de seis de las 30 mayores empresas globales de manufactura de esos instrumentos, exportando productos como equipos de transfusión y terapia celular, dispositivos de neurología especializada e instrumentos de acceso cardiovascular, de acuerdo al Clúster de Dispositivos Médicos.

Mucho camino por recorrer nos queda, pero ahí vamos.

Etiquetas

Periodista especialista en temas de salud.

Artículos Relacionados