Con sus altas y sus bajas se marcha 2018. Las celebraciones deben ser prudentes y acogidas a las disposiciones de los organismos de socorro para evitar hechos lamentables en vías públicas y las carreteras, como ocurrió en Navidad y Nochebuena, con un registro de 12 muertos.
El año 2019 espera al pueblo dominicano con los abrazos abiertos, pero hay que actuar con cautela en medio de la normal celebración, por haber traspasado todo el umbral de este año con logros y fracasos. Cada quien, dentro de sus posibilidades, debe contribuir a que el año 2019 entre en un ambiente de paz.