Antonio y Maribel Espaillat son trasladados a la sala de audiencias
Santo Domingo.- Con la cabeza baja y escoltados por agentes de seguridad, Antonio Espaillat López, propietario de la discoteca Jet Set, y su hermana Maribel Espaillat fueron trasladados este miércoles al Palacio de Justicia de Ciudad Nueva para conocer la medida de coerción en su contra.
Ambos son investigados por el delito de homicidio involuntario, a raíz del colapso del techo del reconocido centro de entretenimiento que dejó 236 personas muertas y más de 180 heridas.
La audiencia, que estaba pautada para iniciar a las 11:00 de la mañana en el Primer Tribunal Colegiado, comenzó con un retraso de casi una hora debido al traslado tardío de los imputados.

Lea también: «Aún duele»: El drama humano detrás del desplome en Jet Set llega a los tribunales
La solicitud de coerción
Según consta en el expediente del Ministerio Público, los hermanos Espaillat “mostraron una inmensa irresponsabilidad y negligencia, al no hacer lo necesario para que el techo del Jet Set Club fuera intervenido de manera adecuada y especializada para poder evitar una tragedia que cobrara la vida del público y de sus empleados, que confiaban en la supuesta seguridad del lugar”.
La investigación apunta a que el colapso del techo, ocurrido en medio de una actividad multitudinaria, pudo evitarse si se hubiesen tomado las medidas estructurales mínimas de mantenimiento.
Para las autoridades, el caso evidencia no solo una falla técnica, sino una cadena de decisiones negligentes que costaron vidas.
Además, el Ministerio Público señala que los imputados habrían intentado intimidar o manipular a empleados de la empresa Inversiones E y L, S.R.L., responsable de la operación del Jet Set, quienes podrían fungir como testigos claves en el proceso judicial.