En el torneo de béisbol está sucediendo lo que todos suponían que iba a ocurrir tarde o temprano, que muchos peloteros y personal técnico de los equipos tendrían una alta probabilidad de infectarse con el coronavirus, sin importar los muchos controles que pudieran implementar las autoridades sanitarias y de los equipos.

La indisciplina es el factor que más incide en el incremento del contagio del virus, y los peloteros y técnicos de los conjuntos no son de otros planetas, por el contrario, esos muchachos en su gran mayoría son prácticamente incontrolables en sus diferentes sectores cuando terminan los partidos.

Por lo tanto, era previsible que muchos se contagiaran en el fragor de las cherchas que seguro, participan y patrocinan con sus “panas”, porque los dominicanos solos “así y así somos”, y es muy difícil, casi imposible, que se produzca en ellos, un cambio de mentalidad de la noche a la mañana.

La única manera de mantener el virus controlado, es aplicando reglas como las implementadas por la NBA en la denominada burbuja, lo cual, según los reportes, vienen ejecutando hasta el momento, los Leones del Escogido.

Si no se adoptan rápido rigurosas medidas, el coronavirus podría en los próximos días, dar al traste con el campeonato, porque no se puede permitir bajo ningún concepto que sigan produciéndose contagios como los que se han originado en por lo menos dos equipos.

Y si eso ocurre entre peloteros y técnicos, que no podría pasar, si se permite el ingreso de fanáticos.

En términos políticos, al gobierno le conviene la realización del torneo pero si siguen los contagios, el presidente Luis Abinader sería el primero en reconocer la gravedad del asunto.