Ante la denuncia de un diputado

Cuenta el libro de Éxodo, Antiguo Testamento, que en una secuencia de plagas invadió a Egipto una de langostas que en poco tiempo destruyó frutos y vegetación de tal manera que ni las hierbas escaparon de su capacidad destructiva.

Esta langosta es, en realidad, una especie de grillo, o saltamontes, con una capacidad desmedida para la destrucción de la vegetación allí a donde llega.

Hacemos este breve preámbulo a propósito de una denuncia, del diputado Elías Wessin Chávez, acerca del daño que según sus palabras tiene lugar en el parque nacional Los Haitises.

De acuerdo con el legislador, que habló en la sesión del miércoles de la Cámara de Diputados, los mogotes de este vedado están siendo tomados por haitianos que se han instalado y depredan el bosque.
Si esto está sucediendo es grave, y es deber de la autoridad ambiental realizar la investigación debida y ponerle remedio al desafío si es corroborado.

Tal vez no sea necesario volver a destacar la importancia de Los Haitises para los regímenes de lluvia en una franja importante del país por la carga de humedad que es arrastrada por los vientos tierra adentro. Por lo visto el legislador Wessin Chávez ha dejado en claro este y otros puntos.

Es importante, también, que la investigación de la denuncia incluya la de posibles participantes nacionales en estas incursiones que ponen en riesgo la integridad de un parque nacional reconocido por su importancia ecológica, pero también por la fragilidad de su constitución.

Tradicionalmente estos extranjeros han incursionado en estos y otros parques nacionales impulsados por agricultores, comercializadores de algunos rubros agrícolas y por ganaderos. Sus efectos pueden llegar a ser como los de aquellas langostas referidas al principio.
Investigar esta denuncia es un deber.