Anny Fernández: “El trabajo es un esfuerzo constante”

Santo Domingo.- Para muchas personas la idea de emprender un negocio en nuestro país viene a ser en estos días casi una utopía, debido a la gran cantidad de trámites a seguir y dinero a invertir.
Sin embargo, para Anny Fernández crear su academia de ballet, simplemente fue necesaria la ilusión de que paso a paso lograría formar niñas en un lugar donde aprendieran y disfrutaran el arte de la danza.
Con apenas 21 años, Fernández tenía tres empleos, pero esta no era su meta y la incertidumbre de abrir su escuela la llevaron a abandonar uno de ellos para dedicarse a su proyecto de vida.
Esta profesional de ballet narra que hizo presupuestos que se quedaron muy cortos a la hora de ejecutar su idea y que ni siquiera los préstamos que obtenía eran suficientes para cubrir los gastos de la reciente escuela.
“Continué el proyecto, pero empezar conlleva mucho dinero y tú tienes que invertir, pero también recibí mucha ayuda de mi esposo y mi familia”, dijo.
Esta joven comprendió que para crecer necesitaría esfuerzo, dedicarse con pasión a enseñar ballet y tener la fe en Dios que sin importar las circunstancias su sueño más que una empresa crecería.
