De manera muy especial, cuando se está ante una fecha tan importante como el 130.º aniversario de “Listín Diario”, se hace un alto en el camino para reflexionar sobre su último acontecimiento revolucionario, y que lo lleva a trillar un nuevo camino como diario de formato compacto desde el 11 de marzo de este año.
De eso hace poco más de cuatro meses. Un nuevo camino al que se suman las batallas libradas en nombre de la libertad de expresión y el derecho a informar con objetividad a los lectores, legítimos destinatarios de las informaciones que se ofrecen a diario.
El nuevo formato aporta a su circulación. Se convierte en un valor agregado a su férrea naturaleza informativa, ejemplo a toda prueba de su renovación en el tiempo.
Un tiempo que incluye su total identificación a un nuevo siglo, enfrentando los retos de plataformas colaterales de información y sin descuidar la responsabilidad que implica hacer un ejercicio profesional imparcial, veraz y de franca competencia, a través de su agresiva versión digital.
La verdadera razón de ser de “Listín Diario” no solo está en lo que ha dicho, a través de todo un siglo y 30 años, sino en lo que tiene por decir en la edición de hoy y las que vendrán.
Felicidades a su director, Miguel Franjul, a Fabio Cabral, subdirector; y a los periodistas, muchos de sangre nueva, que en un concierto de voces les dan a sus páginas una vigorosa vigencia diaria; y naturalmente, a los inversionistas y ejecutivos del área administrativa, por el tesón en su trabajo.
