Amor con barreras

Barrera: algo que impide retrasa, separa, bloquea. Cuando se conoce a alguien y aparece una mutua atracción, generalmente no se piensa en obstáculos ni barreras, sólo se disfruta el momento.

Viene el enamoramiento, durante el cual se involucran sustancias entre las cuales están las endorfinas y la dopamina que provocan gran sensación de emoción y felicidad.

Nadie quiere perder esa sensación, por lo que no se está preparado para protegerse de algunas barreras. La pareja se embarga en sólo disfrutarse mutuamente, se despierta la pasión, y no se ven las dificultades, dedicándose básicamente a sentir.

Estas barreras pueden ser emocionales o psicológicas basadas en miedos e inseguridades o en traumas pasados; idiomáticas y/o culturales; físicas; sociales y familiares, que no permiten una relación sana y duradera.

Las situaciones de barrera se comienzan a concientizarnos cuando los neurotransmisores como la dopamina y otros, empiezan su descenso de producción y se despierta a la realidad.

Este es un tema espinoso y desagradable, porque, ¿cómo decirle a una persona enamorada que se detenga y se concientice? Es sumamente difícil. Despertar del sueño del enamoramiento y toma su tiempo.

Algunas barreras se ven desde el primer día o primer tiempo, otras, más tarde.

Lo ideal sería que los primeros encuentros sean para conocer aunque sea un poco, las situaciones de cada uno, en términos de forma de pensar y actuar, de requerimientos para mantener esa relación, de posibilidades de resolución de esas barreras.

Todo esto antes de involucrarse físicamente, porque luego es más difícil.
Medítelo y en su próximo ‘click’ con alguien, practíquelo.