SANTO DOMINGO.-Cada dólar que suba el barril del petróleo a nivel internacional se traduce en un alza de US$64 millones en la factura petrolera del país, que cerró el año pasado con un aumento de un 30 por ciento. Por el contrario, cada dólar que baje el crudo genera un ahorro en la misma proporción.
Ese monto equivale a RD$3,000 millones, similar a lo invertido por el Gobierno en el Teleférico de Santo Domingo, y 25% mayor a lo que espera recaudar Impuestos Internos con el proceso de renovación de marbetes.
Es por eso que cualquier movimiento en el precio del barril del petróleo crea consecuencias devastadoras para las economías que, como República Dominicana, dependen de las importaciones de crudo.
Ese monto fue calculado en base al nivel de consumo de combustible local, que se acerca a los 64 millones de barriles por año, según precisó a EL DÍA el economista Henri Hebrard.
Estimaciones
Aunque el barril del petróleo sobrepasó el lunes la barrera de los US$60 (y luego bajó a US$59.3), fruto de tensiones entre Estados Unidos y Arabia Saudí, la economía dominicana puede estar tranquila; ya que los niveles promedio de compra siguen por debajo de los de 2018.
El año pasado, la factura petrolera dominicana cerró en US$3,730 millones, con un valor promedio de compra del barril de US$58.45.
En el primer semestre de ese año, el valor promedio del barril rondaba los US$65; sin embargo, en el mismo período de año, oscila los US$57. Igualmente, en la segunda mitad de 2018, el costo fue de US$65, y en el mismo periodo de este 2019 se espera que ronde los US$60 el barril.
“Esto indica que el precio de este año será de 10 y 12% que el del año pasado, con un barril de US$52; por lo cual la factura petrolera será más baja que la de 2018”, proyectó
Henri Hebrard estima que la factura petrolera cerrará este año entre US$3.1 millones y 3.2 millones (500 millones menos).
Volatilidad
— Petróleo baja
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cayó ayer un 5,7 % y cerró en 59,34 dólares el barril. El lunes había subido casi 15 % por un recorte de 5% del suministro mundial por atentados Arabia Saudí.