DILENIA CRUZ
Mantener la curiosidad y el interés en las cosas nuevas alejan la posibilidad de desarrollar el alzhéimer o retrasarlo, según muchos estudios realizados.
Las actividades que involucran la interacción cerebral son vitales para mantener el cuerpo y la mente saludable.
La salud y buen funcionamiento del cerebro es responsabilidad de una serie de actividades bien pensadas y realizadas por quienes se hacen conscientes de la importancia de mantenerlo joven, en especial cuando entran en la edad de retiro.
Si bien es cierto que las enfermedades pueden iniciar en cualquier momento, también es cierto que hay marcadores que la impulsan más en unas personas que en otras, especialmente en la edad más adulta.
Los aspectos más significativos a tomar en cuenta cuando se trata de la prevención o retraso del alzhéimer están agrupados en ocho grandes franjas, llamadas los ocho pilares del cerebro. Al envejecer y retirarse de la vida productiva, incluso de la familiar, la actividad cerebral empieza a reducirse.
Los neurólogos manifiestan que es como si el cerebro recibiera el mandato de empezar a apagarse. El proceso es más rápido para los que realizan poca actividad mental.
De ahí la importancia de mantenerte activo aprendiendo nuevas cosas como un idioma, instrumento musical o seleccionar algún pasatiempo que te apasione que te permita continuamente haciendo nuevas y duraderas conexiones.
La socialización con relaciones de calidad es también un verdadero impulso para la buena salud y prevención de enfermedades, así como una alimentación balanceada, actividad física, dormir bien y controlar factores de riesgo. Estos son los pilares del bienestar.
