BAGNERES-DE-LUCHON, FRANCIA.-Gas lacrimógeno en los ojos de los ciclistas. Una protesta de granjeros en la ruta. Dos caídas en peligrosos descensos.
Lo único que faltó en una alocada 16.ª etapa del Tour de Francia fue un vuelco en la clasificación general al dar comienzo a la última semana de la ronda.
El francés Julian Alaphilippe capitalizó su habilidad para los descensos para llevarse ayer la victoria en una etapa, la primera de tres seguidas en los Pirineos, y que fue brevemente interrumpida cuando la policía empleó gas lacrimógeno para dispersar una protesta de granjeros que bloquearon la ruta con fardos de heno.
Thomas es líder
La clasificación general sigue intacta. Geraint Thomas, con la casaca amarilla, el segundo Chris Froome y el tercero Tom Dumoulin cruzaron la meta al unísono, todos con un retraso de 8 minutos y 52 segundos.
Thomas mantiene una diferencia de 1 minuto y 39 segundos sobre Froome, el cuatro veces campeón del Tour y su compañero en el equipo Sky. Dumoulin está 1:50 detrás.
La protesta de los granjeros se produjo en el kilómetro 30 del trayecto de 218 kilómetros (135 millas) entre Carcasona y Bagneres De-Luchon. Thomas, Froome, el campeón mundial Peter Sagan y otros corredores de la jornada recibieron gotas de agua por los efectos del gas lacrimógeno durante un atraso en la carrera.
“Primero me ardió en mi garganta y nariz, y los ojos me quemaban después”, dijo Froome. “Pero creo que muchos corredores quedaron en una situación similar. Suerte que el efecto no duró mucho. Fue algo temporal que fue incómodo”. Fue el más reciente de los incidentes que han involucrado al público”, dijo.
15 Minutos.
Se retrasó la vuelta por la protesta de los granjeros en el trayecto durante la competencia.