Santo Domingo.-El presidente de la Asociación Dominicana de Ingenieros Agrónomos (ADIA), César Matos, afirmó que las autoridades le ocultan a la población la información de la presencia de una nueva plaga que afecta a más de 150 especies de frutas y vegetales del país, incluidos todos los que son exportados a mercados externos, principalmente a Estados Unidos y Europa.
Matos informó que la plaga, la oruga de los coles, fue localizada en La Vega, un insecto cuya larva se come y hace galerías en las coles de cualquier fruto dándole una apariencia muy penosa.
Explicó que aunque todavía no se ha estimado cual será el impacto económico que va a producir, las autoridades deben actuar de inmediato para saber si se ha expandido, y considera obligatorio declarar en cuarentena la agricultura.
Entrevistado en el programa Toque Final que se transmite por Antena Latina, canal 7, el ingeniero Matos acusó al ministro de Agricultura, Ángel Estévez, de ser el principal responsable de que la Mosca del Mediterráneo y la nueva plaga estén afectando los productos nacionales, debido a su ¨pobre gerencia técnica¨.
Sin embargo, dijo que la responsabilidad del problema de las plagas ya no está en manos del ministro, quien ha demostrado sobradamente que no puede manejar problemas de esa naturaleza, sino que recae sobre el presidente Danilo Medina, quien está a cargo de conducir al país por un derrotero de progreso y éxito, no de fracaso para los agricultores y productores.
Sostuvo además, que de manera reiterada se les advirtió a los funcionarios de Agricultura sobre la inminente amenaza y la penetración de esos insectos, pero se negaron a acatar las recomendaciones técnicas, y ahora es necesario hacer las correcciones de lugar sacando a los negligentes de su posición.
Precisó que el éxito de la cuarentena de vegetales en cualquier país es impedir que las plagas afecten los cultivos, y destacó que la noticia del ministro de que en un mes el problema estaría resuelto, es como poner una curita en un cáncer o en una herida muy grave, pues a su juicio no es así, porque se está hablando de la agricultura no de un proceso industrial donde las condiciones están controladas con robótica.
¨Aquí estamos hablando con seres vivos, con poblaciones dinámicas, cuyo comportamiento depende de la propensión del ecosistema a reproducirse rápidamente, y estamos en el trópico, donde las condiciones son ideales para tener hasta doce o más generaciones de la plaga¨, agregó.