Santo Domingo.-La Asociación de Empresas Industriales de Herrera y Provincia Santo Domingo (AEIH) instó hoy a los veedores de las instituciones públicas y a los suplidores serios a cerrar filas contra las artimañas y la astucia de funcionarios que buscan beneficios alterando licitaciones y los procesos de compra para autobeneficiarse.
La organización empresarial se pronunció en estos términos al respaldar el planteamiento del ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo, de que los esfuerzos deben concentrarse en “en evitar que esas prácticas del pasado puedan continuar en el presente y repetirse en el futuro”.
El presidente de la AEIH, Víctor Castro, consideró trágico que pese a la voluntad que se evidencia en el gobierno de crear una cultura de transparencia, aun sobreviven “sectores oscuros” en las instancias públicas haciendo trampas cotidianamente “para salirse con las suyas en los procesos de compras y licitaciones”.
“Si las veedurías juegan su papel pueden convertirse en catalizadoras de la transformación institucional y cultural que requiere el país para establecer gestiones transparentes y éticas, que hagan un buen uso de los recursos públicos”, señaló Castro.
Sostuvo que la lucha de todos los sectores sensatos del país debe ser –como dijo el ministro Montalvo- por las mejores prácticas internacionales en compras y contrataciones, tener reglas claras,
estimular la competencia, promover la transparencia, fortalecer la rendición de cuentas, ser económico y eficiente en el uso de los recursos públicos y los plazos de entrega.
Exhortó a los veedores a redoblar con valentía los esfuerzos para detectar las trampas y denunciarlas públicamente, como forma de contribuir con la cultura de transparencia, motivando que se apliquen sanciones legales y sociales a quienes desvían los recursos públicos.
“Hacemos nuestras las palabras del ministro Gustavo Montalvo, pronunciadas recientemente en un taller para veedores, en el sentido de que debemos pasar del imperio de la excepción al imperio de la ley. Y del estado de privilegio al estado de derecho. En todos los ámbitos de la vida. Desde lo más grande a lo más pequeño”, sostuvo la AEIH.
Consideró inadmisible que, además de contar con recursos escasos para responder a las demandas del desarrollo, el Estado sea víctima de “personeros oscuros y parasitarios” que atentan contra los fondos públicos en prácticas criminales que deberían ser sancionadas sin miramientos.