Incansable, es la palabra que encontré en el diccionario para describir al candidato presidencial del PRM Luis Abinader.

Somos muchos. Amigos, familiares, colaboradores, que no conocíamos la capacidad de trabajo político del seguro próximo presidente de la República: Luis Abinader.

La pasión, dedicación y empeño, que ha puesto el joven político a la actividad política en esta campaña electoral ha dejado boquiabiertos a sus propios contrincantes, que no se han atrevido a caerle atrás.

Y es que no es todo el mundo que en 48 horas, te puede recorrer hasta 30 comunidades, con tiempo para caravanear, saludar, abrazar, reunirse, escuchar , dar entrevistas , discursear y hacer todas las cosas que corresponden a un político.

Sólo quien está consciente de la responsabilidad asumida, de la esperanza que tiene en él todo un pueblo defraudado, puede hacer lo que Abinader está haciendo en su marcha arrolladora hacia el Palacio Nacional.

Pero no sólo por su proyecto particular, llegar a la presidencia de la República, también en ayudar a sus compañeros, alcaldes y directores de distritos, a ganar.

Su incansable labor lo ha llevado a tirarse en hombros la campaña de esos candidatos municipales en todo el país, y eso está dando sus frutos.

En cuanto a su proyecto personal, los resultados están a la vista con el punta-punta que está logrando en la carrera presidencial, con posibilidad de ganar en primera vuelta.
En lo municipal, pronto se verán los resultados de esa labor incansable de Luis cuando la noche del domingo 16 se conozcan los resultados de esas elecciones.

No me cabe la menor duda de que esa incansable actividad del joven Abinader, la llevará al Palacio Nacional, y a partir de ahí, el país tendrá un presidente de lujo.

Lo confieso, me ha sorprendido. Y como dijo uno de sus colaboradores también sorprendido por la capacidad de trabajo política de Luis, el hombre quiere ser Presidente.