Al paso que se mueve el caso de los asaltantes de una sucursal del Banco Popular, en poco tiempo podría ser necesaria un área entera del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva para mantenerlos detenidos mientras un tribunal les conoce la medida de coerción propia de estos casos, o de un autobús para trasladar a los implicados al centro de reclusión en el que les corresponda, si es que son enviados a una cárcel.
¿Una táctica?
Según representantes legales de algunos de ellos, deben de haber otras personas que supieron de lo que se tramaba y que tal vez colaboraron.
Pero esto puede ser, en realidad, una forma de perjudicar a alguien, o una táctica para la defensa de su “representado”, como les gusta decir a los abogados como una forma de ganar distancia entre su trabajo y el caso.