This NASA image obtained August 21, 2015 shows scores of baby stars shrouded by dust revealed in this infrared image of the star-forming region NGC 2174, as seen by NASA's Spitzer Space Telescope. Some of the clouds in the region resemble the face of a monkey in visible-light images, hence the nebula's nickname: the "Monkey Head." However, in infrared images such as this, the monkey disappears. That's because different clouds are highlighted in infrared and visible-light images.Found in the northern reaches of the constellation Orion, NGC 2174 is located around 6,400 light-years away. Columns of dust, slightly to the right of center in the image, are being carved out of the dust by radiation and stellar winds from the hottest young stars recently born in the area. In this image, infrared wavelengths have been assigned visible colors we see with our eyes. Light with a wavelength of 3.5 microns is shown in blue, 8.0 microns is green, and 24 microns in red. The greens show the organic molecules in the dust clouds, illuminated by starlight. Reds are caused by the thermal radiation emitted from the very hottest areas of dust. AFP PHOTO/NASA/JPL-CALTECH = RESTRICTED TO EDITORIAL USE - MANDATORY CREDIT "AFP PHOTO /NASA/JPL-CALTECH " - NO MARKETING NO ADVERTISING CAMPAIGNS - DISTRIBUTED AS A SERVICE TO CLIENTS =
Washington.- Los científicos de la Agencia Aeroespacial de EE.UU. (NASA) consiguieron la noche del domingo contactar con una sonda de investigación solar que llevaba perdida casi dos años, informó la institución.
La sonda Stereo-B, diseñada para trabajar en conjunción con otra similar realizando observaciones del Sol, dejó de comunicarse con la Tierra el 1 de octubre de 2014, y durante 22 meses el equipo responsable de la misión ha estado intentando restablecer contacto.
El contacto fue establecido por el observatorio Deep Space Network, que vigila las comunicaciones de misiones espaciales.
Según la NASA, la prioridad ahora es ahora “ampliar el proceso de recuperación para evaluar la salud del observatorio, restablecer control y evaluar todos los subsistemas e instrumentos».
La comunicación con la sonda espacial se perdió después de reiniciar los sistemas de la nave para preparar una de las fases más delicadas de la misión, cuando la sonda quedaba oculta por el Sol.
El reinicio de los sistemas no se produjo de manera adecuada y la sonda quedó oculta por el Sol y, después, no se volvió a saber nada más de ella.
Los científicos tenían la dificultad añadida de localizar a la sonda sin saber en qué parte de su órbita se encontraba exactamente, mientras que algunos investigadores consideraron que un fallo en uno de los sistemas que detectan la velocidad llevó a la sonda a rotar fuera de control.
Las dos sondas Stereo estaban pensadas para realizar una misión de dos años que les llevaría a observar la actividad del Sol desde las caras opuestas que no se pueden observar desde la Tierra.