- Publicidad -

- Publicidad -

5 principios de un líder estoico

En el estoicismo buscamos inspiración para la práctica del liderazgo político basado en principios que tanto requiere nuestro país en el ámbito gubernamental, los partidos políticos y en todas las esferas sociales. Aquí 5 principios que encontramos leyendo a Marcos Aurelio y Séneca.

  1. El buen líder prioriza el bien y la comunidad:
    Marco Aurelio afirmaba: “Hagan lo que hagan o digan lo que digan, por mi parte estoy ligado al bien”. Apostó por el bien en un ámbito en que la ética ha sido siempre escasa y asunto de tontos. También privilegió la comunidad frente a los intereses particulares afirmando: “Lo que es bueno para la colmena, es bueno para la aveja”.
  2. El poder es pasajero:
    La repetida frase memento mori de los estoicos, debe resonar en la mente de todo líder en el ejercicio del poder. Si tanto la vida como el poder son pasajeros, ¿por qué perder el tiempo en hacer las cosas mal cuando se pueden hacer bien?
  3. Huir de la vanagloria:
    Un puesto puede rebelar lo mejor o lo peor del ser humano. El poder puede enloquecer a las personas o volverlas esclavas de la vanagloria.
    El gran reto de un líder con poder es mantener su esencia y su humanidad, aun en medio de la parafernalia. Un líder auténtico que no sucumbió a la vanagloria y la locura del poder fue Marco Aurelio. Afirmó su virtudes en un cargo que enloqueció a figuras como Nerón, Calígula o hasta su mismo hijo Cómodo que no pudo manejar el poder y pasó a la historia como uno de los peores emperadores de Roma.
    El líder estoico ve el poder como destino ineludible para el ejercicio de la racionalidad y la bondad. Actúa por convicción no por aplausos porque, como dice Séneca: “La recompensa de hacer el bien, es haberlo hecho”.
  4. Convertir la adversidad en oportunidad:
    El buen líder estoico está consciente del infortunii viventem. Vive los buenos tiempos consciente de que vendrán malos porque la adversidad es ley de vida y se prepara para ella desde la prevención, la anticipación y la planificación. Como dijo Séneca: “Es en tiempos de seguridad cuando el espíritu debe prepararse para los futuros contratiempos”.
  5. El líder que promueve la igualdad y el cosmopolitismo:
    El líder estoico está consciente de la hermandad existencial de los seres humanos y la igualdad. Si todos somos racionales, tenemos el mismo origen y la misma dignidad, hay que que tender puentes y buscar las mejores alianzas en bien de todos huyendo de la polarización y el maniqueísmo, porque, al fin de cuentas, como dijo Marcos Aurelio: “El mundo es mi ciudad”.

Etiquetas

Altagracia Suriel

Columnista de El Día

Artículos Relacionados