Rehabilitación cardiaca, vida luego de un episodio cardiovascular

Las enfermedades cardíacas son la primera causa de muerte en la población a nivel mundial y se estima que seguirá siendo así, a pesar de que en los próximos 20 años se vislumbra un cambio significativo en el orden de las primeras diez causas de muerte en los países desarrollados.
El doctor Francisco Bentz Brugal, especialista en Medicina Física, Rehabilitación y Salud Deportiva en el Cedimat, expresa los factores más importantes para tomar en cuenta en la recuperación después de un episodio cardiovascular.
Los índices
A diario se escucha a los médicos alarmados por el alto índice de personas que sufren de alta presión arterial, diabetes, obesidad, malos hábitos de alimentación, falta de hacer ejercicios, todo unido a la ingesta excesiva de alcohol y el tabaquismo. Como resultado, se tiene un individuo propenso a ser blanco de enfermedades cardiacas y cerebrales isquémicas (interrupción del suministro de sangre al cerebro), embolicas o trombóticas (causadas por un coágulo sanguíneo).
La medicina moderna ha logrado arrebatar, con sus procedimientos y tratamientos, una gran parte de estos pacientes de las manos de una muerte segura, pero los sobrevivientes son individuos con cierto grado de discapacidad para cumplir con las tareas que ejercían antes de enfermarse.
Etapa crítica
Luego de haber rebasado la etapa crítica, con o sin intervención quirúrgica, muchos tienen miedo a la actividad física, dudas acerca de sus hábitos alimenticios, y en el caso del paciente en República Dominicana, debe salir a enfrentarse a un sistema de salud que no es nada integrador ni previsor y mucho menos educativo.
Para ayudar al paciente a regresar a su vida normal después de un episodio cardiaco, surgen los programas de rehabilitación cardiovascular, a mediados de los años 60, para dar respuesta a ese periodo en el que este está entre la enfermedad y la recuperación.
Las consecuencias
Las enfermedades cardiacas frecuentemente arrastran depresiones e inadaptación a las modificaciones en la vida. La rehabilitación cardiovascular es idónea para la recuperación, a través de la prescripción de ejercicios y cambios sustanciales en su estilo de vida, con programas de educación en las áreas de nutrición, el conocimiento de su enfermedad, autocontrol y manejo de estrés.
Es útil para recuperar a los individuos que han sido afectados por la enfermedad cardiovascular a regresar a un estilo de vida similar a antes de enfermarse y, en ciertos casos mejorarlo sustancialmente.
Con programas que guían el día a día del paciente se busca prevenir que el evento cardíaco ocurra de nuevo.
En Inglaterra se ha logrado la disminución de re-infartos en un 40 por ciento de los pacientes gracias a la rehabilitación cardíaca, además de una mejor adaptación post-enfermedad a una vida más sana.