Santo Domingo.-El  envejecimiento es un proceso natural y no una enfermedad, por lo que el adulto mayor experimenta cambios biológicos, lo que  lo hace un grupo con riesgo de desnutrición.

El  médico panameño especialista en nutrición  Alfredo Matos señala que se debe procurar una alimentación balanceada en todas las etapas de la vida, y que esta deberá ser suficiente en cantidad, completa en porciones de los diferentes grupos de alimentos, variada y adecuada para las condiciones físicas de cada persona.

Afirma que la alimentación adecuada debe ir acompañada de  actividad física para que los envejecientes puedan tener una mejor calidad de vida. 

Recomienda a las personas dedicadas al cuidado del adulto mayor tener mucha paciencia y sobre todo conocimientos básicos de la biología del envejecimiento y los aspectos que pueden contribuir o no a un óptimo estado nutricional.

Además, indica que el cuidador debe incentivar la práctica de la  actividad física regular en el adulto mayor. Menciona que la actividad física es una de las prioridades en salud pública en todas las edades, siendo fundamental para los adultos mayores   como forma de prevención de enfermedades crónico-degenerativas.

Matos explica que en esta etapa de la vida están indicadas de preferencia las actividades aeróbicas de bajo impacto, como caminar, nadar, bailar o andar en bicicleta.

Agrega que los principales beneficios evidenciados científicamente de la actividad física regular para los adultos mayores son el aumento de la masa muscular, fuerza muscular, flexibilidad y densidad ósea, aumento del volumen sistólico, ventilación pulmonar, disminución de la frecuencia cardíaca y de la presión arterial y mejora del perfil de lípidos.

De acuerdo a Matos, existe también mejoría del autoconcepto, autoestima y disminución del estrés, ansiedad, insomnio, consumo de medicamentos y mejora de las funciones cognitivas y de la socialización.

Falsa creencia

“El problema es que creemos que ser adulto mayor es sinónimo de estar delgado y, en verdad, gran parte de esa delgadez significa desnutrición severa que puede llegar a su máxima expresión conocida como “fragilidad”.