En la proximidad del 480 aniversario de su fundación y más allá de la historicidad que constituye a la Universidad Autónoma de Santo Domingo como primera academia formal de América, es tiempo de que el sistema de la Educación Superior continental y de la misma sociedad dominicana puedan entender la verdadera dimensión y el rol de importancia que esta institución representa en la movilidad social y en los procesos de transformación ideológica que se auspician desde esta academia.
La Universidad Autónoma de Santo Domingo, conforma un amplio recipiente de desarrollo humano activo y un entorno vital para la nación dominicana; en ese orden es esencial estructurar desde la sociedad una mirada externa objetiva al conjunto de los componentes elementales de esta entidad.
Es tiempo de que, en esa academia, se puedan acuñar voluntades para redefinir los elementos administrativos y académicos en real pertinencia de un fuero Universitario contemporáneo; ha llegado la etapa de complementar el espacio creativo de esta institución de Educación Superior pública dominicana con el sentido de la calidad, competitividad y pertinencia educativa.
Al acercarse el cuarto lustro del nuevo milenio y a cuatro meses del proceso de elección de nuevas estructuras directivas y académicas, es la oportunidad esperada para que un nuevo equipo logre asumir las prospectivas de la UASD con instrumentos adecuados de gestión y planes operativos para ubicarla en la posición cimera que le corresponde en el ranking de las Universidades latinoamericanas.
Es imperante posicionar a la UASD, con voluntad de viabilidad social, visión y pragmatismo ante los nuevos escenarios tendenciales que marcan los referentes exitosos de la Educación Superior del continente americano. Es pertinente, además, que esta academia sea regulada por un plan maestro de renovación en sus funciones sustantivas y tecnológicas, regida en una sistematizada estrategia de innovación, a la vez fusionada con los patrones globales de reformas curriculares para cada área y así lograr potenciar los modelos de nuevos nichos del conocimiento.
Un gran reto lo representa la selección de un conjunto directivo de cuadros académicos y de gestión altamente calificado, que pueda asumir los ideales institucionales y las prioridades operativas de manera integral, con transparencia y proactividad en el desarrollo conjunto de la UASD, como una Universidad de vanguardia apegada al desarrollo de la nación.
*Por ELMER GONZÁLEZ, Arqto. Máster en Educación Superior
Secretario General UDEFAL
Académico. Investigador. Ensayista.
