Zoila Luna y la periodista Rosaury Rodríguez.
Santo Domingo.- En algún momento de la vida todos perdemos a alguien o a algo, es inevitable vivir el proceso del duelo.
En la actualidad millones de personas han muerto tras la pandemia del coronavirus, y aun así sus familiares y personas cercanas deben continuar con sus rutinas diarias. Nos bombardean diciéndonos que debemos ser fuertes, que lo vamos a superar.
En un conversatorio con la comunicadora y psicoterapeuta Zoila Luna, abordamos el tema del duelo para aprender a lidiar con este proceso.
Zoila Luna nos arrojó luz durante un live realizado por este periódico, a través nuestra cuenta de Instagram.
Zoila Luna
¿Qué es el duelo?
“El duelo es una pérdida, y se puede generar en cualquier ámbito, no solo por la muerte física, sino también por la pérdida de un empleo, una mascota, cuando un hijo se va a vivir al extranjero o cuando terminamos una relación, entre otras, es decir, estamos experimentado duelo constantemente”.
¿Cómo se aprende a vivir con el duelo?
”¿Cómo aprendes a vivir con la diabetes? La diabetes y el duelo no se curan, aprendes a vivir con la ausencia”. “No obstante, no en todos los procesos de pérdida hay una manifestación de duelo”. “El duelo no se sana, se aprende a vivir con él”.
Podemos manifestar distintas reacciones ante el duelo
• Negación
• Rabia
• Depresión
• Aceptación
Zoila Luna dice que generalmente cuando una persona pierde a alguien solemos decirle que debe ser fuerte, buscamos mil maneras para ayudar a otros, pero lo que deberíamos de hacer es preguntarle a esa persona que es lo que realmente quiere”.
Tenemos el derecho de llorar, sentirnos tristes, cada persona lleva su propio ritmo.
“Tú no tienes que ser fuerte, tú tienes que sentir” aseguró la Psicoterapeuta.
Señales de alerta
• ¿Perdiste interés en las cosas que antes te agradaban?
• ¿Cuándo fue la última vez que hiciste algo que te gusta?
• ¿Estás durmiendo bien?
• ¿Estás comiendo bien?
• ¿Estas apática?
• ¿Nada de lo que hacías antes, lo estás haciendo?
Si presentas estos síntomas en señal de alerta para acudir a terapia, advierte la psicoterapeuta.
Finalmente
Zoila Luna nos cuenta una breve anécdota del momento que perdió a su madre:
“Mi madre muere casi con 89 años, esto me supero, fue un proceso de resistencia y negación, no se está preparado para la muerte de un ser querido, aprendemos a relacionarnos con esa persona, mantener rituales nos ayuda a incorporar a ese ser querido en momentos importantes”.
Cuando yo extraño mucho a mi mamá, yo enciendo una velita “dijo Zoila emotivamente.
En conclusión
Las personas van a seguir su vida normal, extrañando su muerte, ¿Cómo podemos ayudar a otros? Respetando su ritmo.
