Todavía durante el fin de semana muchos me cuestionaban sobre el por qué el Licey cambió a Yamaico Navarro, que hace apenas una una temporada era considerado como el “out más difícil”, y aunque viene de su peor año es un jugador con solo 31 años.
Los Tigres recibieron al jugador de esquinas internas Carlos Franco, quien nunca pudo adueñarse de una posición a tiempo completo con los Toros del Este, aunque todavía es joven (28 años).
Hay mil razones para cambiar un jugador, algunas no divulgables. Rejuvenecer el roster, reducir la nómina, desechar encontronazos internos , evadir travesuras, etc.
En el caso de los Toros apuestan a un recurso que viene de dar beneficios óptimos con la contratación de Jordanny Valdespín y Rubén Sosa, quienes venían de tener dos años pobres con Estrellas y Escogido, quizás sus dos peores registros, pero con los Toros construyeron una mancuerna que llevó al equipo romanense a la final con números de MVP.
Considero que Navarro todavía está en capacidad de poner números interesantes la próxima campaña, a un menor precio y con rostro representativo. Comprendo a los liceístas que están rabiosos…
DE REFILÓN… Qué bueno está el volibol superior, que buen nivel, y a partir de hoy comienzan a debutar Bethania de la Cruz, Lisvel Eve Mejía, Niverka Marte, entre otras reinas… A Miguel Tejada no encuentro la manera de defenderlo y he buscado la forma, pero, definitivamente, no la hallo,
