Yadhira Pimentel: “Con la llegada de mis hijas encontré mi gran pasión”

Yadhira Pimentel: “Con la llegada de mis hijas encontré mi gran pasión”

Yadhira Pimentel:  “Con la llegada de mis hijas encontré mi gran pasión”

Yalía y Yaimar junto a Yadhira Pimentel.

SANTO DOMINGO.-Su primera maternidad le trajo muchas dudas y miedos, lo que ella no sabía era que esa bendición tan grande llegaría por partida doble, pues precisamente su hija la motivó a compartir lo que sentía en el embarazo y de esas cosas que no se leen en los libros y que les ocurre a la mayoría.

Esta historia de una madre primeriza, feliz y preocupada a la vez, dio pie a la creación del proyecto Madre S.O.S., que con el paso de los años se ha convertido en un multimedio que acompaña a las madres con información de valor.

La protagonista de esta historia es la comunicadora, ‘coach’ y facilitadora experiencial Yadhira Pimentel, quien recuerda con emoción esos inicios, pues se estaba estrenando como madre y también como y orientadora vivencial, ayudando a madres, padres y familias completas.

Esta apasionada de los temas de maternidad, madre de Yalía y Yaimar, asegura que el desarrollo del mismo le ha ayudado a potenciar la crianza de sus hijas, ya que la mantienen en una constante autoevaluación como persona y como madre.

“La maternidad y la decisión de dirigir un multimedio enfocado en estos temas me lleva a no parar de aprender y a estar actualizándome constantemente con libros, talleres y certificaciones”, apuntó Pimentel.

Disfrutar los roles

Destaca que es un reto de todos los días compartir los roles de madre, esposa y profesional, pero asegura que ha aprendido a disfrutarlos. Dijo: “Entendí que mis hijas necesitan a una madre feliz, plena, que viva su propósito y les enseñe el valor que esto tiene.

Un día me desmayé, colapsé y estuve cerca de un cateterismo, ese momento me hizo despertar y decidí responsablemente soltar, dejar ir, entender que cada día trae su afán, y, sobre todo, a priorizar, entendí que puedo tener una agenda cargada de reuniones, estar sin servicio en casa y ese día se come de la calle y no pasa nada”.

Sueña con ver a sus hijas crecer emocionalmente sanas, reconociendo su valor como personas y mujeres cumpliendo su misión en la vida, que sean auténticas.

Cree que el gran reto de estos tiempos es parar el piloto automático en el que se está viviendo, perdiendo de vista las pequeñas cosas, como la presencia, la capacidad de disfrutar el aquí y el ahora con los hijos, escucharlos, mirarlos, de entender su mundo y hacerlos sentir que pertenecen a una familia que los acepta tal y como son.