Frederich E. Bergés
Habiendo concluido exitosamente la jornada cívica de las elecciones del pasado domingo, por lo cual felicitamos a todo el pueblo, las autoridades electorales y sobre todo los candidatos ganadores encabezados por el próximo presidente Luis Abinader Corona, surge la pregunta
¿y ahora que pasará?
Lo primero y más importante es que la pandemia del Covid-19 sigue, y peor aún, luce que está nueva vez en auge. Por ello el primer objetivo es un tema de salubridad, lo cual a su vez en adición a requerimientos adicionales de recursos financieros para su combate, podría traernos nuevas medidas de control y aislamiento social.
De ello, el control y diminución de la tasa de nuevos infectados, dependerá todo el resto, incluyendo lo económico y las capacidades de maniobra del nuevo gobierno.
La economía se encuentra en su nivel más bajo de los últimos años, incluyendo un mayor desempleo y pérdidas multi-millonarias de los sectores comerciales y productivos.
Hablar de reactivación sin el control sanitario apropiado es una quimera. Se logró aprobar un presupuesto complementario para cubrir las necesidades financieras públicas hasta al menos el próximo 16 de agosto. Pero ello no garantiza nada puesto que el nuevo equipo económico tendrá de inmediato enormes responsabilidades y decisiones.
Será necesario verificar la realidad financiera del estado, depurando la enorme plantilla de gastos, decretando medidas de austeridad y alinear los programas de ayudas sociales así como sus beneficiarios. Ello es prioritario ya que de inmediato se deberá decidir entre ellos cuáles se continuarán, y bajo qué modalidad serian.
El Estado requiere retomar su capacidad recaudadora incluyendo la eliminación de fraudes y persecución de la evasión. Sin la restauración de una base estable de ingresos poco podrá hacer el nuevo gobierno, amén de prepararnos para nuevos endeudamientos.
El verdadero plan de gobierno lo veremos en el proyecto de presupuesto del 2021, porque ya este se cocinó. ¡Olviden las promesas que llegó el tiempo de enfrentar las realidades!
