Nueva York.-El plan de Volkswagen es a la vez audaz y encomiable. En un intento de dejar atrás el escándalo del diésel, la compañía proyecta vender 3 millones de autos eléctricos al año para 2025, aproximadamente la cuarta parte del total.
El objetivo para los vehículos eléctricos también puede llegar a hacer un agujero en las ganancias del fabricante de autos alemán -salvo que pueda hacer grandes ahorros de costos en otra parte. No será fácil.
Lo que está en juego es la rentabilidad futura de la división fabricación de autos de VW.
Antes del escándalo por las emisiones diésel, generaba un beneficio operativo de 11.000 millones de euros anuales, casi el total de las ganancias. La Volkswagen supone que su estrategia aumentará su beneficio de explotación sobre las ventas no menos de un tercio en los próximos ocho años.
Pero, ¿será así? Harald Hendrikse, analista de Morgan Stanley, teme que, para 2025, vender montones de vehículos eléctricos podría, por el contrario, hacer que la unidad de fabricación de autos de VW genere pérdidas. Volvería a ser rentable a fines de esa década.