Volkswagen estaría cerca de obtener la aprobación reguladora para una serie de correcciones de bajo costo para 8,5 millones de vehículos diésel que fueron manipulados en Europa, un avance en su intento por superar un escándalo sobre emisiones fraudulentas.
El fabricante de automóviles se enfrenta el escándalo de emisiones en tres frentes: un software adulterado que instaló en alrededor de 11 millones de vehículos en todo el mundo; certificaciones de dióxido de carbono irregulares en unos 800,000 vehículos en Europa y un software adicional de emisiones cuestionables en unos 85.000 vehículos VW, Audi y Porsche.