Vivimos momentos de constante transformación en poco tiempo. Algunos pensarán que involucionamos, otros, que ciclos se repiten y otros, que es algo inevitable. Pero muchas de las situaciones que rechazamos, de las que nos quejamos y responsabilizamos en lo externo, es porque viven en nuestro mundo interno.
Algunos se preguntarán ¿por qué resurgió la guerra en el mundo? Y hasta tomarán partido por uno u otro sector. Me pregunto ¿no será que vivimos cada uno en guerra interna entre nuestro Ser y la falsa identidad creada? Nuestros conflictos al mirar nuestras decisiones van desde llevar el cuerpo físico donde no quiere ir, cuando no nos escuchamos, cuando decimos “sí” y queremos decir “no”, cuando no expresamos la emoción real, cuando ese mundo que veo y no quiero es el que proyecto con mis pensamientos de separación, miedo.
Al escuchar esa voz interior que nos habita, viviremos en consonancia con el Ser y actuaremos con la paz que es el bien más preciado de cualquier mortal.