Miguel Otáñez.
*Por Miguel Otáñez
La economía del contenido en Internet ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años. Con la proliferación de plataformas digitales y redes sociales, se ha creado un mercado en línea que ofrece oportunidades tanto para los creadores de contenido como para las empresas y marcas que buscan llegar a nuevas audiencias.
Una de las principales razones de este crecimiento es la accesibilidad de Internet, la cual, según el informe de 2022 publicado por We Are Social y Hootsuite el número de usuarios de internet era de 4,950 millones de personas, lo que representaba al 62,5% de la población mundial, unos 7.910 millones. Estas cifras no van a la baja, lo que ha llevado a un aumento en la demanda de contenido en línea. Desde blogs y videos hasta música y podcasts, el contenido digital se ha convertido en una parte integral de nuestras vidas.
Esta creciente demanda ha llevado a la monetización de contenido en Internet. Los creadores de contenido ahora pueden ganar dinero a través de diversos medios, como la publicidad, el patrocinio de marcas y el crowdfunding. Las plataformas también ofrecen programas de afiliados y de membresía, lo que les permite obtener ingresos adicionales.
Sin embargo, aunque hay estudios que sitúan la cantidad de creadores de contenidos en unos 50 millones en todo el mundo, la realidad es que se trata de algo muy difícil de estimar puesto que todos, de una forma u otra, somos creadores de contenidos.
Lo propio pasa con la cantidad de dinero que genera esta “profesión”, la misma es muy difícil de estimar, algunos estudios presentan la cifra de 104 billones de dólares, mientras que otros la elevan a 200.
Microsegmentación y nuevas comunidades
Otro aspecto importante de la economía del contenido en Internet es la segmentación de la audiencia. A diferencia de los medios tradicionales, donde se intenta llegar a una audiencia masiva, en línea es posible dirigirse a nichos específicos. Esto ha llevado a la creación de comunidades en la internet que comparten intereses y pasiones comunes, y que están dispuestas a consumir y apoyar el contenido que les interesa.
Sin embargo, también hay desafíos en esta economía del contenido en Internet. La competencia es feroz y la atención de los usuarios es limitada. Para tener éxito, los creadores de contenido deben ofrecer contenido de alta calidad y seguir las tendencias y preferencias de la audiencia. Además, también deben desarrollar estrategias de marketing efectivas para destacar entre la multitud, donde es válido mencionar el riesgo que corren muchos para ofrecer originalidad y adrenalina en sus entregas.
En adición, la piratería y los derechos de autor son problemas que afectan la economía del contenido en Internet. A pesar de los esfuerzos por controlar la violación de los derechos de autor, aún existen muchos casos de contenido pirateado y compartido ilegalmente, lo que afecta los ingresos de los creadores legítimos.
La economía del contenido en Internet ha abierto nuevas oportunidades para los creadores de contenido y las marcas, permitiendo la monetización de sus productos y servicios. Sin embargo, también presenta desafíos en términos de competencia y protección de los derechos de autor. A medida que la tecnología y el acceso a Internet continúen desarrollándose, es probable que la economía del contenido en Internet siga evolucionando y transformando la forma en que consumimos y compartimos información y entretenimiento.
