Las personas cuyas visas B-1/B-2 de Estados Unidos fueron expedidas posterior al mes de enero de 2009, podrán renovar las mismas sin la necesidad de solicitar una cita para tomarse huellas digitales, ya que no será un requisito actualizar los datos biométricos.
Este criterio está definido en las preguntas que deben contestarse cuando se realiza el perfil para realizar el pago de la visa.
En vez de la opción de pautar la cita para la toma de huellas digitales, le saldrá una hoja de confirmación especificando que usted está exento de la toma de huellas y le indicarán las instrucciones de dónde y cómo depositar.
Esta exención aplica solamente para visas B-1/B-2 que hayan sido expedidas después de enero de 2009, con una validez de 10 años y con entradas múltiples. También, el solicitante debe presentar la renovación en el mismo país donde la visa fue expedida y debe ser nacional del mismo o tener un estatus de residente legal.
Luego que su solicitud de renovación sea recibida en el Consulado de Estados Unidos y su caso evaluado, quedará a opción del oficial consular contactarle para que usted se presente a una entrevista y aclare cualquier información adicional y si es necesario, tomarle sus huellas digitales.
Como siempre aconsejamos, verifique bien las preguntas del perfil y llene correctamente el formulario de solicitud. Errores en estos procesos pueden hacer más complejo su caso y hasta causarle la negación de su visa.
Otro factor importante, es el tiempo de estadía en cada uno de sus viajes.
Si usted realiza viajes seguidos con estadías prolongadas, el oficial consular puede asumir que no ha usado debidamente la visa y le rechazará su renovación.