Santiago de Chile.-El virus del papiloma uumano (VPH) es descrito por quienes lo han estudiado como tranquilo en su evolución. Para que sufra algún cambio en su comportamiento deberán pasar unos diez mil años.
Existen unos 100 tipos y guardan relación con el desarrollo de cánceres, sobre todo el cérvico-uterino.
Este virus se clasifica en tipos, de alto y de bajo riesgo oncológico. Entre los genotipos de alto riesgo se encuentran VPH16 y 18, los cuales provocan la mayoría de los cánceres de cuello de útero, vulva, vagina, ano y pene.
Los segundos son aquellos cuyo riesgo de provocar cáncer es bajo y son el VPH 6, 11, 40, 42, 53, 54 y 57.
Andrea Vicari, asesor de Inmunización de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), señaló como una ventaja la estabilización del virus en su evolución, ya que permitió a los organismos científicos identificar al VPH tipos 16 y 18 como los más agresivos.
Los dos juntos se relacionan con aproximadamente el 70 por ciento de los cánceres del cuello del útero; los demás 11 tipos de alto riesgo con la parte restante.
El virus es una enfermedad que se transmite a través del contacto sexual y forma parte de las enfermedades de transmisión sexual a todos (mujeres y hombres).
“Hemos estado expuestos, en algún momento al contagio del VPH”, dijo.
El asesor de la OPS dijo que realmente el problema no es si se encuentra una vez, “sino la persistencia del virus y el tipo que es”. Argumentó que cuando se habla de persistencia se refiere a si la infección dura más de seis o doce meses.
“Todo el que inicia una actividad sexual está expuesto a infección y en la mayoría de las personas es de corto plazo.
El 10% de las personas desarrollan infecciones persistentes, es decir que duran en el tiempo, y estas son aquellas contra las cuales la vacuna en particular protegerá para que no haya infecciones persistentes, que tienen la probabilidad de desarrollar células anormales y después convertirse en un cáncer”, explicó Vicari.
Reiteró que este mal forma parte de las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS), “de hecho, es la enfermedad transmitida más frecuentemente que existe. Podemos asumir que todos se expondrán después del inicio de la actividad sexual”.
Sin licencia para sexo
La vacuna para el VPH es para prevenir a futuro el cáncer cérvico-uterino y no una licencia para iniciar las relaciones sexuales más temprano.
La inyección no tiene efecto terapéutico, es decir, no es un tratamiento, aseguró María Teresa Valenzuela Bravo, consultora del Instituto Sabin Vaccine.
La también asesora para la OPS y presidenta del Comité Asesor en Vacunas y Estrategias de Inmunización del Ministerio de Salud (CAVEI) en Chile explicó que la edad recomendada para aplicar la vacuna ronda entre los 9 y 13 años, ya que se supone que las niñas no han comenzado su actividad sexual.
“Todos los estudios de los distintos institutos nacionales, toda la información que se puede recopilar, sustentan esto. Si bien es cierto que la actividad sexual la empiezan bastante temprano, antes de esa edad es muy mínima la proporción de jóvenes de 13 años que haya iniciado la actividad sexual”, indicó.
Ambos profesionales de la salud participaron en la III Sesión de Información de Vacunas celebrada en Santiago de Chile organizada por el Instituto de Vacunas Sabin, en colaboración con la Universidad de los Andes. En el mismo participaron periodista de toda la región de Las América.
Vacuna en RD
República Dominicana podría tener en agosto, dentro de su Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), dependencia del Ministerio de Salud Pública (MSP), la vacuna contra el virus del papiloma humano.
Las autoridades dominicanas se encuentran trabajando para que la jornada de vacunación se realice conjuntamente con el Ministerio de Educación.
El director del PAI, Zacarías Garib, explicó que aún deben discutir con el Ministerio de Educación cómo lo harán, ya que la población a la que van dirigidos los inmunológicos es de niñas que están en las escuelas.
Garib dijo que la propuesta consiste en que la vacunación inicie con la apertura del año escolar 2014-2015.
Sin embargo, aún esperan que los organismos nacionales e internacionales decidan si serán dos o tres las dosis que se aplicarán.
En la actualidad a nivel privado se aplican tres y se cobra un aproximado de 10,000 pesos, que serían unos 250 dólares a la tasa actual.
Garib precisó que tan pronto se elija uno de los dos laboratorios que están presentando la propuesta de colocar dos dosis y no tres, se procederá a realizar el registro sanitario junto con el aval técnico científico que garantice que con solo dos vacunas la población femenina estará protegida contra esta enfermedad.
“Hasta ahora la propuesta será de dos dosis con uno de dos laboratorios, condicionado a que los laboratorios logren el registro, porque de lo contrario la vacuna sería de tres dosis”, destacó.
De cumplir con el protocolo de las dos dosis, entonces el paso a seguir sería poner la primera vacuna al inicio del año escolar y la segunda cuando regrese de las vacaciones de Navidad.
La vacunación sería a las niñas a partir de nueve o diez años.
“Tenemos un promedio de cien mil niñas, ya que la vacuna va dirigida a la prevención del cáncer cérvico-uterino”, dijo el funcionario dominicano.
Para alcanzar esta población indicó que lo harían en coordinación con el Ministerio de Educación, ya que esta cartera tiene acceso a la plantilla estudiantil.
Descartó que haya un rechazo por parte de la población, porque previo a esto se haría una movilización social para educar y orientar a la ciudadanía.
Para medir el alcance de la vacuna se deberá implementar un sistema que permita captar el comportamiento del cáncer cérvico-uterino, que podría ser a través de los centros oncológicos, públicos y privados. Agregó que para ningún país es sencillo medir el impacto de esta enfermedad.