Santo Domingo.-El abogado Vinicio Castillo Semán (Vinicito) dijo que es una lástima que monseñor Francisco Ozoria luzca en una actitud fusionista de los dos países de la isla, haciendo causa común con la campaña internacional de Haití contra este país.
En su primera misa oficiada el día de Año Nuevo, Ozoria llamó a la sociedad a mirar a los inmigrantes y refugiados con la mirada contemplativa de la fe, apoyándolos en cuanto al desarrollo humano integral.
Entrevistado en el programa radial Cuentas Clara, Castillo expresó que República Dominicana ha sido el país más solidario con el pueblo haitiano, y negar eso es una mezquindad, porque “hemos dado mucho más de lo que podemos”.
“Esa solidaridad tiene un límite, que es lo que Ozoria no quiere entender.
Tiene el límite de un pueblo pobre con escasos recursos para los pobres de aquí, que son millones, y no puede dar esos pocos recursos para hacerle frente al drama humano de diez millones de haitianos indigentes que tienen su mira puesta en venir a la República Dominicana”, dijo el jurista.
Castillo sostuvo que las declaraciones de monseñor Ozoria dan la impresión de que esa solidaridad no ha existido con el pueblo haitiano.
En cuanto a la opinión de Gabriel del Río y Rafael -Pepe- Abreu, quienes señalaron que un país no puede recibir más inmigrantes de los necesarios, Castillo Semán dijo que es algo lógico, ya que entiende que el obrero dominicano no tiene quien le escriba, porque los líderes sindicales han estado al margen de la defensa de los trabajadores dominicanos.
Indicó que la medida anunciada por la JCE de asignar apellidos a niños obedece a presión internacional de la ONU y Unicef para documentar a haitianos, y que el presidente Danilo Medina expresó que en su viaje a Panamá,el jefe de la ONU le planteó que querían un millón de haitianos como dominicanos”.
Víctima.
Entiende que con la asignación de apellidos se podría hacer un daño a los niños, porque serán víctimas de “bulling” y estigmatizados.
Algo difícil.
Castillo dijo que para su familia es una situación difícil tener que criticar una JCE presidida por Castaños Guzmán.