MARIGOT. – El huracán Irma causó daños materiales «importantes» en las islas de San Bartolomé y San Martín en el Caribe, luego de tocar tierra en la isla de Barbuda por la madrugada con ráfagas de hast 295 km/h.
El huracán de categoría 5, la máxima en la escala que mide estos fenómenos, se desplaza hacia el oeste noroeste y amenaza Anguila, las islas Vírgenes británicas, la punta este de Puerto Rico y quizás Haití.
El ojo del huracán, de unos 50 km de diámetro, permaneció alrededor de una hora y media en la isla francesa de San Bartolomé y azotó luego la franco-holandesa de San Martin.
El mar «está golpeando con una extrema violencia» en las costas y hay una «gran sumersión de las zonas bajas del litoral», señaló la agencia meteorológica francesa Meteo France.
«Los daños materiales ya son importantes», declaró Annick Girardin, ministra de Ultramar francesa, quien habló de «tejados arrancados» y cortes en las comunicaciones entre París y estas islas francesas de las Antillas.
El huracán Irma tocó tierra este miércoles de madrugada en la isla de Barbuda, con vientos de hasta 295 km/h, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos, y sigue avanzando por el Caribe, donde podría desencadenar enormes tormentas y olas gigantes.
El avión en el que viaja el papa Francisco hacia Colombia tuvo que desviar su ruta para evitar este fenómeno. La isla francesa de Guadalupe, más al sur de las Antillas, no sufrió el azote tan temido.
La alerta roja de ciclón fue levantada este miércoles. Cuando pasó por el Atlántico, Irma tenía «una intensidad sin precedentes», dijo el servicio francés de meteorología, Météo France.
Ya es más potente que los huracanes Luis (1995 San Martín), Hugo (1989, 15 muertos en Guadalupe) y Harvey, que recientemente azotó Texas y Luisiana provocando la muerte de 42 personas y más de 100.000 millones de dólares en daños materiales.
El viento «de un poder destructor» se intensificará en las dos islas al paso de las horas. La peor etapa se espera entre las 06H00 y el mediodía local (10H00 y 14H00 GMT), con ráfagas superiores a 300 km/h.
Los servicios meteorológicos ya midieron ráfagas de hasta 360 km/h, algo que no se vio desde el huracán Gilbert en 1988. También se esperan lluvias diluvianas.
La casa tiembla
El paso del ojo del ciclón se vio acompañado «de una tranquilidad temporaria y engañosa», como un sifón que genera una fuerza centrífuga y por lo tanto un vacío.
Pero a esto le sigue un «muro de nubes y vientos que provocan las condiciones más extremas», advirtió Jerome Lecou, de Météo France. En un primer momento, Météo France registró vientos de hasta 244 km/h en San Bartolomé, una de las islas favoritas de la ‘jet-set’, pero el organismo perdió sus instrumentos de medición sobre el terreno, arrastrados por el propio huracán.
«El viento se intensifica, la casa tiembla», señaló Bruno, de 57 años, contactado por teléfono en esa isla francesa. Por el ruido, Bruno, que ya conoció a «Hugo, Maryline, Luis, Gonzalo, Georges», estimó que Irma «es más violento que Gonzalo o Maryline. En relación a Hugo lo sabremos después».
La televisión pública holandesa, NOS, indicó que el huracán provocó «enormes daños» en San Martín, y mostró imágenes tuiteadas por Radio Caraibes International, que mostraban coches abandonados medio sumergidos y barcos dañados o destruidos.
Peter Jan de Vin, comandante de la Marina de guerra holandesa en el Caribe, escribió en un tuit hacia las 12H00 GMT que la isla de San Eustaquio se encontraba en el ojo del huracán.
«El ruido del viento se parece al de un tren de carga. Reportes de tejados arrancados», dijo por su parte en un tuit el gobernador de la isla de Saba, otro territorio de ultramar holandés, Jonathan Johnson.
Todavía hay «incertidumbre» con respecto a Florida, señaló Lecou. ¿Llegará Irma a la costa oeste o a la este? «Los dos escenarios son plausibles», indicó.
El presidente estadounidense, Donald Trump, declaró el estado de emergencia en Florida, Puerto Rico y las Islas Vírgenes para liberar fondos en caso de emergencia ante el paso de Irma.
La evacuación de las islas de Key West, en el extremo sur de Florida ya está en curso. «Vigilo de cerca el huracán. Mi equipo, que hizo y hace un muy buen trabajo en Texas ya está en Florida», tuiteó el presidente.
En Haití en cambio, que aún no se repuso del huracán Matthew de octubre, la población apenas fue alertada de la llegada de Irma.
La AFP constató que en los barrios pobres de la segunda ciudad del país, Cabo Haitiano, con las viviendas de techos de chapa que no resistirán al huracán, nadie fue alertado.