Víctima de intento de asesinato denuncia amenazas y teme por su vida ante retrasos judiciales

SANTO DOMINGO.- Joel de Jesús Rodríguez Durán, víctima de un intento de asesinato ocurrido en la provincia La Altagracia, Higüey, expresó su preocupación por el retardo injustificado en el proceso judicial seguido contra los acusados, tras denunciar que teme por su vida y ha recibido amenazas recientes.

Los imputados, identificados como Orlando Cedeño Acosta (Ligth), Reyme Yoan Eusebio Cedeño, Omar Antonio de la Cruz Veras, Pedro Vallejo González y Neifis Neftalís Núñez Espinal (El Sobrino), atacaron a tiros a Rodríguez Durán con armas largas (fusiles) mientras este transitaba en su camioneta, según consta en el expediente.

La víctima logró sobrevivir, aunque padece secuelas psicológicas y permanece en estado de alerta constante ante nuevas amenazas.

Rodríguez Durán denunció que el proceso ha sido objeto de reiteradas maniobras dilatorias, lo que ha impedido la celebración oportuna de las audiencias y la correcta administración de justicia.

Manifestó que ha recibido nuevas amenazas directas contra su vida, lo cual agrava su situación y refuerza el sentimiento de abandono institucional. “Temo que, si no se actúa con rapidez y firmeza, mi vida corra un riesgo inminente”, advirtió.

Asimismo, hizo un llamado urgente a las autoridades competentes de la provincia La Altagracia, al Ministerio Público y a la Inspectoría del Poder Judicial, para que presten atención al caso, se evite la impunidad y se garanticen sus derechos fundamentales como ciudadano amenazado.

“En nombre de la verdad, de la legalidad y del derecho a la vida, espero que se haga justicia. No puedo seguir esperando. Exijo y pido justicia en mi caso”, expresó con firmeza.

Este caso representa no solo un atentado contra la vida de un ciudadano, sino también una grave afrenta al sistema de justicia y al principio constitucional de tutela judicial efectiva. El clamor de Joel de Jesús Rodríguez Durán es legítimo y urgente: que se celebre el juicio, que se imparta justicia y que se le garantice protección como víctima de un crimen grave.

Los imputados permanecen recluidos en la cárcel de Anamuya.

El proceso judicial está a cargo de los jueces del Primer Tribunal Colegiado de Higüey, quienes fijaron las audiencias para los días 14, 15 y 16 del presente mes.