Bomberos con espuma especial actuaron rápidamente.
SANTO DOMINGO.-“La gente se volvió como loca y empezamos a salir todos por las ventanas…”; “Cada quien estaba tratando de resolver su vida…”; “Salí asustada, me caí y tuve que salir por el ala del avión…” fueron de los testimonios de algunos de los 130 pasajeros y diez tripulantes que viajaron en el vuelo L5-203 de Santo Domingo a Miami, tras incendiarse allí el ala derecha del avión, obligando así a un aterrizaje forzoso.
El incidente aéreo del martes en que tres personas resultaron heridas, convirtió la pista de aterrizaje del Aeropuerto internacional de Miami (MIA), en un caos y desde adentro de la nave y las afueras se escuchaban los gritos de la gente que corría despavorida al ver las llamas y humaredas expandirse.
“Agarré a mis hijos, traté de salir por la puerta de atrás, y me lastimé el brazo”, dijo otra de las viajeras, en escenas captadas por la Cadena de Televisión Telemundo.
“Eso es un milagro porque todos salieron sin heridas graves y todos van a reunirse con sus familias, sus amigos y continuar sus vidas, aunque tuvieron un shock muy grande”, comentó la alcaldesa de Miami, Daniella Levine.
RED Air investiga
El presidente de la aerolínea RED Air, Héctor Gómez, informó ayer que los detalles del incidente serán ofrecidos tras concluir las investigaciones.
A través de un comunicado la aerolínea informó a la opinión pública que el martes 21 de junio, a las 5:45 p. m., el vuelo L5-203 que cubría la ruta entre las ciudades de Santo Domingo y Miami, presentó dificultades técnicas después de aterrizar en el aeropuerto Internacional de Miami.
“Queremos informar que los 130 pasajeros y 10 tripulantes fueron evacuados y atendidos según los protocolos establecidos y se han cumplido los debidos procesos aplicables a estos casos”, dijo el comunicado.
“En RED Air expresamos nuestra absoluta solidaridad con los pasajeros y el equipo de tripulantes de la aeronave”.
Investigación
— Causas
La Comisión Investigadora de Accidentes de Aviación (CIAA), órgano adscrito al IDAC, junto a las autoridades de la ciudad de Miami, iniciaron las investigaciones a fin de determinar las causas del hecho.
