Hugo López Morrobel
La temporada de Fórmula Uno 2024 inicia mañana en Baréin, Arabía Saudí, con pronósticos muy favorables para la escudería Red Bull, de que retendrá el título logrado con suma facilidad en las últimas campañas, bajo la conducción del piloto neerlandés Max Verstappen, quien junto al mexicano Checo Pérez, completa el dúo.
A pesar de los esfuerzos en muchos aspectos que han venido realizando tradicionales escuderías como Mercedes y Ferrari, se les ha hecho imposible seguirle los pasos a la Red Bull.
Verstappen ha obtenido tres campeonatos mundiales al hilo desde 2021, siendo el de 2023 el más fácil, al totalizar 575 puntos, tras ganar en 19 de las 22 carreras, el doble de los obtenidos por el azteca Pérez, segundo con 285.
El neerlandés se ha encargado de prácticamente borrar el nombre del inglés Lewis Hamilton, quien ganó siete campeonato mundiales, desde el 2014 al 2020 en forma ininterrumpida, corriendo para la escudería Mercedes, igualando los títulos logrados por el alemán Michael Schumacher.
Todo indica que la salida de Hamilton tras 12 temporadas en Mercedes, para competir en 2025 en Ferrari, escudería que también ha decaído un mundo, es una muestra de la incapacidad que el inglés observa de ponerse a corto plazo a la par con la Red Bull.
Aparte de Red Bull, Mercedes y Ferrari, otras 17, ninguna con posibilidades, competirán en la temporada, en la que también se espera que se aplaquen un poco los celos de Checo Pérez, quien ha sido insistente en forma vehemente , de que su escudería siempre le da prioridad a Verstappen.
A partir de mañana millones de aficionados a la velocidad tendrán durante varios meses la suerte de disfrutar de ese delicioso “manjar”.
