Santo Domingo.-Con la llegada del verano, República Dominicana se enfrenta a un aumento notable en ciertas enfermedades, tanto infecciosas como no contagiosas.
Este fenómeno se debe a una combinación de factores climáticos, sociales y ambientales que predisponen a la población a diversas afecciones como las de la piel, herpes, algunas provocadas por hongos, gastroenteritis y mayor incidencia de dengue.
Así lo indicó el médico internista, intensivista e infectólogo, José Rafael Yunen, al explicar que las altas temperaturas y la humedad crean un ambiente propicio para la reproducción de vectores como mosquitos y para el crecimiento de bacterias en alimentos y agua.
Sostuvo que en el caso de las enfermedades estomacales como la gastroenteritis son más comunes en el verano por el consumo de alimentos contaminados debido a las altas temperaturas, mientras que la manipulación incorrecta de estos y la falta de higiene pueden contribuir a brotes de esta enfermedad.
Yunen destacó que el dengue es una de las principales preocupaciones durante el verano por la proliferación del mosquito Aedes aegypti, como producto de las lluvias intermitentes.
Para la infectóloga Clevy Pérez este clima es favorable al desarrollo de problemas de la piel como el impétigo, que es una infección de llagas rojas que afecta en mayor medida a los infantes, así como la forunculosis, que es un conjunto de protuberancias llenas de pus.
Además, se incluye las enfermedades por hongos, es decir, micosis. “Para prevenir esto hay que mantener la higiene, bañarse más”, dijo la pasada presidente de la Sociedad Dominicana de Infectología.
También incrementa la insolación y las quemaduras solares, ya que las personas suelen ir a la playa y exponerse durante mucho tiempo al sol, por lo que recomendó el uso de bloqueador solar, sombrero y evitar el sol en horas pico.
Con este clima, subrayó que aumenta la deshidratación con facilidad, lo que lleva a las infecciones urinarias y se ha observado que la radiación ultravioleta reactiva el virus del herpes, como el labial.
Al resaltar la prevención como medida esencial, Yunen sugirió el uso de repelentes, tomar abundante agua y tener buena higiene en alimentos.
Golpes de calor
— Falta aclimatación
Pérez y Yunen, por separado, precisaron que las temperaturas pueden llevar a golpes de calor, especialmente a niños y ancianos, por lo que es vital mantener una buena hidratación, usar ropa ligera y no exponerse al sol.