Abundancia de productos ha hecho que ciudadanos incursionen en el negocio, ante las pocas opciones de trabajo.
SANTO DOMINGO.-La falta de mercado y los bajos precios que ofrecen los agentes intermediarios a los productos agrícolas han hecho que estos pongan a disposición de los consumidores, tanto en las redes sociales como en las calles, productos de calidad que tenían para exportar hacia mercados más exigentes.
Con estas alternativas de distribución, los productores agrícolas buscan evitar que sus ganancias se queden en manos de agentes intermediarios y perder su inversión durante este período de convulsión que ha afectado los precios y la demanda de mercancías del campo.
Tal es el caso de Delio Rincón Ozuna, quien ofertó su cosecha de maíz dulce a través de Instagram y Facebook, y así logró vender una plantación que antes de la crisis tenía contratada con un hotel de Bávaro, pero se canceló por el cese del turismo.
Maíz por Instagram
La venta en las redes sociales “me permitió vender la mazorca a 15 pesos la unidad y 45 pesos la bandeja de tres”, explicó Ozuna al señalar que está listo para la próxima producción, la cual planea también vender por las mismas plataformas.
El mismo medio de distribución utiliza Julio Francisco Sánchez, quien ha logrado vender parte de su producción de limón, lechosa y níspero por las mismas vías.
El productor explica que prefiere esa vía, ya que la por la forma tradicional la mayor ganancia se queda en manos de los distribuidores. “Se nos está perdiendo una abundante cosecha de lechosas, porque los intermediarios desean pagar la libra a tres pesos”, indicó el productor agrícola al agregar que las grandes cafeterías y restaurantes y supermercados no dan más de seis pesos la libra, pero venden los vasos de jugos entre 50 y 80 pesos.
Así mismo, detalla que en el caso de los zapotes el intermediario quiere pagarlos a ocho pesos, pero se venden al público en 40 y 60 pesos. Igual pasa con los nísperos: ofrecen por la unidad seis pesos y los venden a 15 y 20 pesos. Los mangos Keith los quieren a cuatro pesos, pero el jugo lo venden a 90 pesos.
“El productor se queda con el costo de los insumos, fertilizantes, abonos, transporte y al obrero agrícola que cobra 500 pesos diarios, sin embargo las ganancias se quedan entre los que menos aportan que son los intermediarios y dueños de establecimientos ”, lamenta.
Venta en calle
Otro medio utilizado por productores agrícolas exportadores para vender sus mercancías son las calles del Gran Santo Domingo, donde abundan vehículos con todo tipo de productos por debajo de sus precios normales.
Cada día decenas de personas en camiones, camionetas, motores, carros, triciclos y carretillas, se apuestan en las diferentes vías de los municipios para ofertar los productos, lo que ha obligado a que los consumidores tengan diferentes opciones en calidad y precios para adquirir alimentos del agro.