CARACAS.-Venezuela resolvió no prorrogar la presencia del personal diplomático estadounidense en el país alegando que su permanencia representa un riesgo para la paz nacional.
El ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Arreaza, anunció que la tarde del lunes fue convocado a la cancillería el encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos, James Story, para comunicarle que Venezuela decidió “no prorrogar» la presencia del personal diplomático.
El anuncio se dio un día después de que el secretario de Estado, Mike Pompeo, indicara que Estados Unidos retiraría al resto del personal de su embajada en Caracas debido al deterioro de la situación.
A fines de enero Washington había retirado a una parte de su personal diplomático luego de que el presidente Nicolás Maduro ordenó su expulsión y les dio 72 horas para abandonar el país, decisión de la que luego se retractó. Al explicar las razones de la medida, Arreaza dijo en su cuenta de Twitter que medida fue tomada por el “riesgo que entraña para la paz nacional».
Pese a la decisión Arreaza dijo que Venezuela está dispuesta a mantener canales de comunicación y diálogo con Estados Unidos. Desde 2010 ambos países están sin embajador.
Tras la decisión de Maduro del 23 de enero de expulsar al personal diplomático y romper relaciones con Estados Unidos, al que acusó de alentar un golpe de Estado en Venezuela, ambos países iniciaron conversaciones para establecer una oficina de intereses en Caracas y mantener los trámites consulares.
La tensión entre Caracas y Washington se da en medio de una escalada del enfrentamiento entre el gobierno venezolano y la oposición, que convocó el martes a protestas callejeras para continuar las presiones contra Maduro y en rechazo el apagón nacional que se extendió por cuatro días y que según las autoridades ya fue superado en buena parte del país, aunque persisten severas deficiencias en el suministro de agua generadas por las fallas eléctricas, especialmente en la capital.
Washington, junto con otros gobiernos de la región y Europa, ha reconocido como presidente interino de Venezuela al jefe de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó.
Asimismo, ha endurecido las sanciones económicas contra el gobierno de Maduro para presionar su salida del poder. Guaidó llamó el martes a la población a tomar las calles.
“El cese de la usurpación dependerá de nuestra movilización masiva y organizada en las calles», dijo en su cuenta de Twitter el líder opositor de 35 años.
En medio del complejo contexto, una misión técnica preliminar de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos inició una visita al país y se reunió la víspera con Arreaza.
Durante la jornada sostendrán un encuentro con representantes de la Asamblea Nacional, de mayoría opositora. La misión visitará la capital y otras regiones del país entre el 11 y 22 de marzo para elaborar un informe que sirva de base para una posible visita de la Alta Comisionada, Michelle Bachelet, quien fue invitada por el gobierno venezolano.