SANTO DOMINGO.-Una unidad del Sistema de Atención a las Emergencias y Seguridad 9-1-1 desmontó y dejó abandonado un paciente que se fracturó la muñeca derecha mientras jugaba baloncesto en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
Julio Pozo, de 32 años de edad, infógrafo del periódico El Día, sufrió tres fracturas en la muñeca tras caer mientras practicaba baloncesto junto a los periodistas de este diario José Miguel de la Rosa y Estarlin Taveras, quienes inmediatamente avisaron a la unidad del 9-1-1 que estaba a pocos metros de la cancha donde se ejercitaban.
Los integrantes de la unidad B0107 de puesto en ese lugar, luego de observar al paciente lo subieron a la ambulancia, pero dijeron que debían esperar una indicación del centro de control para saber a dónde debían transferirlo. Sin embargo, poco después alegaron que debían dejarlo porque se había producido otra emergencia y tenían que ir a atenderla.
Los compañeros de Pozo insistieron para que lo llevaran al Centro Médico UCE, que está a menos de cinco minutos del lugar, pero sus ruegos cayeron al vacío de la insensibilidad de los paramédicos.
«Nos informan que hay un accidente y que tenemos que ir. Resuelvan ustedes», fue la respuesta de los médicos del 9-1-1 y obligaron a que el paciente bajara de la ambulancia. En ese proceso transcurrieron alrededor de 15 minutos, tras lo cual Taveras y De la Rosa decidieron llevar a Pozo a la clínica por sus propios medios.
Pozo fue llevado al hospital Central de las Fuerzas Armadas, donde comprobaron que tenía tres fracturas. Luego fue llevado al Centro Médico UCE.