“Los que se consideran jefes de las naciones oprimen a los súbditos, y los altos oficiales abusan de su autoridad. Pero entre ustedes no debe ser así.
Al contrario, el que quiera hacerse grande entre ustedes debe ser su servidor, y el que quiera ser el primero deberá ser esclavo de todos.
Porque ni aun el Hijo del hombre vino para que le sirvan, sino para servir y para dar su vida en rescate de muchos”, afirmó Jesús de Nazaret.
Estas palabras dichas a sus discípulos se bastan por sí mismas, a propósito de la falta de solidaridad que exhibe la sociedad dominicana.